El acceso a la vivienda se ha convertido en uno de los mayores retos para las familias españolas. Según el último Observatorio de la Valoración de la Asociación Española de Análisis de Valor (AEV), el esfuerzo hipotecario que actualmente requiere la compra de una vivienda se sitúa en niveles similares a los registrados durante los años 2006 y 2007, en pleno auge inmobiliario. Sin embargo, aunque la deuda de los hogares está lejos de alcanzar las cifras de la anterior crisis, los expertos coinciden en que la presión sobre los compradores vuelve a ser considerable.
En el caso de Tomelloso, la realidad no es diferente. Lograr una vivienda amueblada, habitable y sin necesidad de reforma supone, en la mayoría de los casos, superar los 100.000 euros, una cifra puede resultar inalcanzable para muchos compradores, especialmente jóvenes o familias con ingresos medios. Esta situación ha impulsado a numerosos vecinos a mirar más allá del término municipal en busca de precios más accesibles.
Plataformas especializadas como Idealista muestran que, a menos de 30 kilómetros, aún es posible encontrar casas por un precio inferior. A solo 10 kilómetros de Tomelloso, Argamasilla de Alba ofrece viviendas habitables desde 30.000 euros, e incluso algunas más baratas que, aunque precisan reforma, pueden suponer una oportunidad para quienes buscan invertir con un presupuesto ajustado. En general, existen opciones por debajo de los 50.000 euros en condiciones aceptables para entrar a vivir.
En Pedro Muñoz, a unos 30 kilómetros y menos de media hora en coche, se encuentran inmuebles para reformar desde 20.000 euros, y otros listos para habitar por 50.000 euros aproximadamente. Por su parte, Socuéllamos, situada a unos 26 kilómetros, dispone de pisos sin amueblar desde 40.000 euros, lo que la convierte en otra opción interesante para quienes priorizan el precio frente a la inmediatez.
Otros pueblos del entorno presentan un panorama distinto. En Arenales de San Gregorio, la oferta de viviendas es muy limitada, mientras que en Campo de Criptana predominan las casas para reformar. Las que se encuentran en condiciones de habitabilidad superan ya los 70.000 euros, reflejando una tendencia al alza en esta zona.
Optar por residir en municipios cercanos no solo representa una alternativa económica, sino también una forma de contribuir a la revitalización de los pueblos y frenar la despoblación. Muchos de estos municipios ofrecen servicios básicos, tranquilidad y conexión rápida con Tomelloso, lo que los convierte en una opción cada vez más valorada por quienes no renuncian a tener una vivienda en propiedad.
En definitiva, aunque comprar una casa en Tomelloso puede resultar hoy complicado para muchas familias, el mercado de los municipios de alrededor abre una puerta a la esperanza: viviendas asequibles, a pocos kilómetros y con una calidad de vida más pausada, pero igualmente conectada con el municipio tomellosero.
