En los últimos años, la publicidad de juegos de azar en España ha tenido que operar bajo un marco regulatorio cada vez más restrictivo.
Antes de que el Tribunal Supremo dictara su última decisión sobre este tipo de propaganda, la regulación de los anuncios de apuestas estaba limitada, de forma muy estricta, por el Real Decreto 958/2020, conocido popularmente como la «Ley Garzón».
Esta normativa, la cual entró en vigor a finales de 2020, estableció restricciones a la publicidad de apuestas que afectaron a la industria del juego de forma profunda. Esta ley abarcó desde horarios de emisión hasta la prohibición del uso de celebridades en anuncios.
Debido a esto, los operadores de juego online se vieron obligados a introducir cambios significativos en sus estrategias promocionales, incluyendo la eliminación de los atractivos bonos de casino sin depósito y de otras ofertas habituales antes de la normativa.
El impacto ha sido considerable. Entre 2020 y 2023, la inversión publicitaria cayó un 60 %, lo que supuso un descenso de 526 millones de euros a apenas 203 millones de euros. Mientras tanto, el juego ilegal ganó terreno y llegó a representar entre el 20 % y el 30 % del mercado.
¿Qué estableció exactamente el Tribunal Supremo?
El 10 de abril de 2024, el Tribunal Supremo emitió una sentencia histórica que anuló cinco aspectos fundamentales del Real Decreto 958/2020. Los magistrados consideraron que estas restricciones carecían de suficiente base legal en la Ley 13/2011 (reguladora del juego) y vulneraban la libertad de empresa.
Los artículos anulados fueron:
- Artículos 13.1 y 13.3: Prohibían las promociones dirigidas a captar nuevos clientes, como bonos de bienvenida.
- Artículo 15: Vetaba la aparición de gente famosa en los anuncios, impidiendo colaboraciones con deportistas o influencers.
- Artículo 23.1: Establecía una prohibición general de publicidad en servicios de la sociedad de la información (internet, aplicaciones, páginas web).
- Artículos 25.3 y 26.2-3: Limitaban la publicidad en plataformas de intercambio de vídeos (YouTube, Twitch) y redes sociales.
El principal argumento del Tribunal Supremo fue que estas prohibiciones excedían el marco legal establecido por la Ley 13/2011 y no tenían un respaldo legislativo suficiente. Aunque los magistrados reconocieron la importancia de proteger a los menores de edad y los grupos vulnerables, destacaron que cualquier restricción a la libertad empresarial debe ser proporcional y contar con amparo legal claro.
Principales cambios para la publicidad de apuestas
En cuanto a los principales cambios regulatorios derivados de la sentencia, destacan
1. Regreso de bonos y promociones
- Las casas de apuestas pueden volver a ofrecer bonos más atractivos como «200 % de bienvenida» o «50 giros gratis».
- Resultado: En 2024, los registros mensuales de nuevos jugadores aumentaron un 34,73 %, según datos de los operadores.
2. Uso de celebridades e influencers
- Figuras mediáticas del ámbito digital (como Ibai Llanos o AuronPlay) y deportivo (caso de Rafa Nadal).
- Ejemplo: Casino Gran Madrid lanzó una campaña con el exfutbolista Iker Casillas tras la sentencia.
3. Expansión a plataformas digitales
- Publicidad permitida en Instagram, TikTok, YouTube y Twitch sin restricciones horarias.
- Formatos como historias interactivas, reels y streams patrocinados están experimentando un auge significativo.
4. Inversión publicitaria recuperada
- Aumento del 52 % en el gasto publicitario durante junio de 2024 comparado con el mismo período de 2023.
- Para finales de 2025, las previsiones apuntan a recuperar niveles similares a los existentes antes de la «Ley Garzón».
Es crucial destacar que algunas restricciones siguen vigentes, como el horario limitado para anuncios en televisión y radio (solo se permite entre la 1:00 a.m. y las 5:00 a.m.) y la prohibición de patrocinios deportivos en camisetas o durante retransmisiones de eventos.
Impacto en operadores, medios de comunicación y jugadores
La decisión del Tribunal Supremo favorece a algunos, pero también genera riesgos potenciales para otros actores del mercado.
Para los operadores
- Oportunidad de reactivar estrategias de captación efectivas que estaban vetadas.
- Proyección de crecimiento hasta los 2.000 millones de euros en ingresos brutos de juego (GGR, por sus siglas en inglés) para 2025.
- Desafío de autorregulación para evitar prácticas que puedan provocar nuevas restricciones legislativas.
Para los medios de comunicación
- Las redes sociales y las plataformas digitales han visto un flujo creciente de ingresos publicitarios.
- Streamers en Twitch pueden volver a realizar colaboraciones lucrativas con casas de apuestas.
- Los medios tradicionales siguen limitados por restricciones horarias que no fueron anuladas.
Para los jugadores
- Mayor acceso a promociones y bonos con requisitos de apuesta más razonables.
- Riesgo incrementado de exposición a publicidad agresiva, especialmente para públicos jóvenes.
- Dato preocupante: el 63 % de jóvenes españoles, entre 18-24 años, sigue a influencers que promocionan apuestas.
Una consecuencia indirecta ha sido una mayor competencia con el juego ilegal, el cual representa entre el 20 % y el 30 % del mercado y además opera sin las restricciones que aún afectan al sector regulado.
Perspectivas futuras para la regulación de apuestas
Actualmente en España, el panorama regulatorio de la publicidad de juegos de azar se encuentra en un punto de inflexión. Si se observan las tendencias actuales y los debates en curso, podemos anticipar los siguientes posibles escenarios:
1. Reformas legislativas
- El Ministerio de Consumo evalúa una nueva Ley de Juego Responsable que podría incluir límites de depósito (1.000 euros/mes) y restricciones a bonos que tienen requisitos de apuesta elevados.
- Se debate una posible armonización con normativas europeas en torno al blanqueo de capitales y la protección de datos.
2. Innovación tecnológica y regulatoria
- Mayor implementación de verificación biométrica (huella, reconocimiento facial) para evitar el acceso de menores.
- Uso de blockchain para garantizar transparencia en pagos y porcentajes de retorno al jugador.
- Inteligencia artificial para detectar patrones de juego problemático en tiempo real.
3. Combate al juego ilegal
- Colaboración reforzada con Europol para bloquear dominios no regulados.
- Creación de un registro único de jugadores centralizado en la Dirección General de Ordenación del Juego (DGOJ) para evitar cuentas múltiples.
En síntesis, la sentencia del Tribunal Supremo ha reconfigurado el escenario del juego en línea en España. Esto ha devuelto flexibilidad publicitaria al sector mientras se mantienen algunas normas, como el horario en medios tradicionales.
El desafío para todas las partes involucradas ahora está en encontrar un marco jurídico que permita el crecimiento sostenible de una industria legítima sin descuidar la protección de consumidores vulnerables y la lucha contra operadores ilegales.
El futuro del sector dependerá del equilibrio que se logre entre la libertad comercial de los operadores y la protección social de los jugadores.
Las plataformas que combinen innovación con responsabilidad estarán mejor posicionadas ante posibles cambios regulatorios. Un ejemplo de ello es la inversión en herramientas como el Registro General de Interdicciones de Acceso al Juego (RGIAJ) para la autoexclusión y los límites de gastos.
