Dolores Buitrago se ha convertido este domingo en una de las pocas personas supercentenarias del mundo, y en la 19 más longeva de España, tras cumplir 110 años de vida en su casa de Puertollano (Ciudad Real). Este domingo, Dolores, que también es la persona de más edad de Castilla-la Mancha, está recibiendo la visita de numerosos amigos y familiares, con quienes no ha dudado en arrancarse con alguna copla.
Entre las visitas que ha recibido se encontraba el alcalde de Puertollano, Miguel Ángel Ruiz, que ha acudido a su casa acompañado del primer teniente de alcalde, José Antonio Barba, y la concejala de Bienestar Social, Sagrario Almodóvar.
Dolores, ‘Dolores, Lolita, Lola’, como a ella le gusta cantar, la hija del posadero de Villanueva de San Carlos, viuda de Santiago, tuvo cinco hijos aunque hoy día solo vive su hija Pilar. Tiene 8 nietos y 12 bisnietos, y a pesar de una vida dura y de muchos momentos amargos no ha perdido la templanza y la sonrisa. Marcada por el paso de sus 110 años, a pesar de la normal sordera por su edad y dificultad en la visión, conserva sin embargo un aspecto y una salud envidiable, y un admirable sentido del humor.
Dolores ha enseñado a coser a muchas mujeres en Puertollano desde su academia de la calle Santa Lucía, tras de atender y sacar adelante a sus hermanos siendo niña y trabajar en la posada de su padre, al quedarse huérfana de madre. Hasta hace unos años le gustaba pintar y hacer manualidades y no duda en ponerse a cantar una coplilla si su hija Pilar, a su nieta Ana, o alguna de las cuidadoras le da pie a ello.
El alcalde ha obsequiado a Dolores con un ramo de flores y un sencillo detalle tras compartir con la familia una celebración tan extraordinaria: ciento diez años de una vida repleta de retos y lucha que ha superado con mucho sacrificio, mucha fuerza de voluntad y el amor de su familia.