El mes de julio de 2023, que ha tenido un carácter muy cálido y seco y ha registrado dos olas de calor en el conjunto de España, se sitúa como el sexto julio más cálido en más de 60 años de registro de datos y el quinto más cálido de este siglo, según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).
El balance climatológico mensual explica que julio fue un mes en general con muy pocas precipitaciones, aunque se registraron algunas tormentas intensas en puntos del este peninsular.
En concreto, la temperatura media mensual en la Península fue de 24,3ºC, es decir 1,2ºC por encima de la media para este mes en comparación con el periodo de referencia 1991-2020. Durante esta treintena hubo frecuentes episodios cálidos pero no tuvieron una duración larga. La AEMET destaca las olas de calor registradas entre el 9 y el 12 de julio y del 17 al 19 de julio, fechas en las que tanto las máximas como las mínimas estuvieron muy por encima de los valores habituales para esta época del año.
Asimismo, la AEMET reconoce otros episodios cálidos destacables, aunque no tanto como para considerarse provisionalmente olas de calor. Se trata de los días 2 y 3 de julio y los días 29 a 31 de julio. Por su parte, los días 25 y 26 de julio las temperaturas fueron inferiores a las normales para la época del año.
En concreto, las temperaturas más altas en este mes de julio se registraron en Córdoba aeropuerto, con 44,5ºC el día 17; en los aeropuertos de Málaga y Granada con 44,2ºC los días 10 y 19 respectivamente; y en Murcia Alcantarilla-base aérea que el día 19 llegó a 43,9ºC.
Durante este periodo se superaron seis récord de temperatura máxima diaria en la respectiva serie de seis observatorios y hubo 12 récord de calor de temperatura mínima más alta.
Las temperaturas mínimas se contabilizaron en los observatorios principales del Puerto de Navacerrada el día 25, con 6,1ºC; en Salamanca-aeropuerto, con 7,3ºC el día 17; los 7,5ºC de Lugo-aeropuerto el día 16 de julio o los 8,3ºC en Molina de Aragón el día 26.
En cuanto a las precipitaciones, el balance climatológico de la AEMET refleja que el mes de julio fue muy seco, ya que se contabilizó un valor medio de 9,9 litros por metro cuadrado, un 41 por ciento menos que el valor normal para el periodo de referencia 1991-2020.
Con estos registros, julio de 2023 se convierte en el cuarto más seco del siglo XXI y en el décimo tercer mes de julio más seco desde el comienzo de la serie en 1961.
Por zonas, julio resultó entre seco y muy seco en casi todo el territorio y llegó a ser extremadamente seco, es decir el más seco, en puntos del norte de León.
Por el contrario, fue húmedo en puntos de Galicia y en zonas del interior de Cataluña, Aragón, gran parte de la Comunidad Valenciana, Murcia y Almería.
Igualmente en ambos archipiélagos tuvo un carácter mayoritariamente seco, aunque en Canarias fue húmedo o muy húmedo en algunas de sus islas, por lo que en conjunto ha resultado ser un mes de julio normal.
Así, las mayores cantidades de precipitación diaria en los observatorios principales se debieron en muchos casos a las tormentas intensas, con abundante precipitación en un breve período de tiempo.
En ese sentido, la AEMET destaca los 36,5 litros por metro cuadrado en Valencia el día 3 de julio; 29,8 litros por metro cuadrado en Zaragoza-aeropuerto el día 6, un día en el que en Pamplona cayeron 29,7 litros por metro cuadrado. En Fuenterrabía se acumularon 28,4 litros por metro cuadrado el día 24 y en Teruel, 22,6 litros por metro cuadrado el día 3.
Finalmente, la AEMET apunta que el volumen total de precipitación mensual más alto se registró en Fuenterrabía, con 87,9 litros por metro cuadrado; 61,7 litros por metro cuadrado en San Sebastián-Igueldo; los 41,2 litros por metro cuadrado en Santander-aeropuerto; 38,2 litros por metro cuadrado en Pamplona-aeropuerto y 37,2 litros por metro cuadrado en Zaragoza-aeropuerto.