El consejero de Sanidad del Gobierno de Castilla-La Mancha, Jesús Fernández Sanz, ha celebrado la inminente decisión del Consejo de Ministros de poner oficialmente al punto y final a la pandemia sanitaria decretada en marzo de 2020, pidiendo, como sanitario de profesión, devolver los aplausos recibidos a la sociedad española.
A preguntas de los medios este martes tras una rueda de prensa, Fernández Sanz ha dicho que en todo caso y pese a que se decrete la obligatoriedad de las mascarillas en determinados espacios, último resquicio de las medidas frente al COVID, hay que hacer un «llamamiento a la responsabilidad» con respeto a los más vulnerables y con la recomendación de su uso en algunos entornos.
Así, se ha mostrado a favor de la retirada de la obligatoriedad en consonancia con el fin de la emergencia sanitaria, aunque ha insistido en aprender «lo que el COVID enseñó, y es que la mascarilla es una protección importante».
