En Castilla-La Mancha, el Partido Socialista de Emiliano García-Page revalida la mayoría absoluta conseguida en 2019 al alcanzar un total de 17 escaños.
Mientras, el Partido Popular mejora sus resultados hasta los 12 diputados y Vox irrumpe por primera vez en el Parlamento obteniendo cuatro actas en el Convento de San Gil, una suma de fuerzas que no sería suficiente para desbancar a los socialistas del Gobierno castellanomanchego.
Con estos resultados, el PSOE mantiene su liderazgo, aunque pierde 2 escaños en comparación con las elecciones de 2019. Por su parte, el PP de Paco Núñez ha sumado 2 nuevos escaños y Vox ha pasado de no tener representación a ocupar 4 escaños.