La escasez de los combustibles que se han empleado hasta ahora y la escalada de precios, nos obligan a innovar para estar al frente y el camino pasa inexorablemente por las energías renovables. La evolución de los proyectos en energías renovables está teniendo un buen protagonismo en Castilla La Mancha. Concretamente en la provincia de Toledo hay un compromiso materializándose con las energías limpias. Y es que es urgente hacer de la transición energética una realidad.
Uno de esos proyectos estratégicos, en una gran extensión de terreno con placas solares cuyo objetivo será abastecer la demanda energética, se desarrollará en la provincia toledana. Este proyecto de parque solar fotovoltaico que reunirá cuatro parques solares situados en Méntrida (El Monte, La Cima, El Valle y La Ladera), con una capacidad total de generar más de 847.000 MWh, equivalente al consumo de cerca de 243 mil familias.
En la búsqueda de un avance económico y social
Méntrida Sostenible es un proyecto que evitará la emisión a la atmósfera de 9,7 toneladas de CO2 cada año, pero que además generará beneficios económicos. Se calcula que el municipio podrá recibir al inicio de las obras 13 millones de euros en ingresos en pago de impuestos y licencias municipales. Además durante la fase de operación se pagarán unos 800.000 euros en impuestos anuales. Y a esto hay que añadir el impulso de la actividad económica y social por parte de la industria auxiliar y servicios.
Qué es la energía renovable
Es aquella que tiene la capacidad de autoregenerarse continuamente, de una forma espontánea y siendo una fuente prácticamente inagotable. Es una energía sostenible que puede satisfacer las necesidades de las generaciones futuras. Se puede encontrar en forma de energía solar, eólica, hidroeléctrica, marina, geotérmica y como biomasa. Salvo esta última, todas las demás son además energías verdes. Y de entre ellas, la energía solar y la eólica son las que ofrecen un mayor potencial.
Esto significa que todas estas energías no emiten gases contaminantes, que es todo lo contrario de lo que hacen el petróleo, el carbón (que contamina el aire en las ciudades) o el gas. Por error se ha estado abusando de esta clase de recursos naturales. Ese abuso de estos combustibles fósiles está de hecho trayendo muchos problemas, entre ellos elevar paulatinamente la temperatura del planeta, creando una crisis medioambiental por el calentamiento global. Pero es que además de eso están empezando a escasear. Y eso hace aún más urgente llevar a cabo la transición energética.
Nuevas fuentes energéticas
Lo que se necesita ahora son, por tanto, fuentes que no contaminen de ese modo y que sean casi inagotables. Por eso se está apostando tanto por las energías renovables, que sólo son contaminantes en su fase de fabricación de la estructura. Es sin duda un gran reto que requiere que los diferentes territorios pongan de su parte e impulsen este tipo de proyectos, como por ejemplo un parque solar.
La forma más extendida de aprovechar la energía solar es a través de placas fotovoltaicas, ya que es el modo más efectivo en cuanto a producción de electricidad partiendo de aprovechar los rayos del sol.
Una generación de energía limpia
Se trata de un asunto de sostenibilidad que es vital para el desarrollo de las generaciones futuras. Las transiciones llevan su ritmo y el avance es un reto, pero es importante hacer un esfuerzo por todas las partes para no quedarse rezagado en la incorporación de estas nuevas tecnologías, porque el cambio climático es un hecho y una emergencia que hay que erradicar.