La primera ola de calor del verano 2021 ha arrancado este miércoles en España, en lo que la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha calificado de episodio «muy adverso», que se prolongará probablemente hasta el próximo lunes.
Aunque las precipitaciones fueron en general escasas, el martes hubo algunas tormentas intensas, especialmente en el sur de Navarra y la provincia de Huesca, donde estuvieron acompañadas de granizo de gran tamaño.
Esta madrugada del miércoles ha sido muy calurosa. A las seis de la madrugada se superaban los 22 grados en ciudades como Zaragoza, Madrid, Barcelona o Valencia, y estaban por encima de 24 grados en Sevilla, Jaén, Almería, Murcia, Alicante o Palma de Mallorca.
«Una noche muy cálida, una madrugada muy cálida como pistoletazo a la ola de calor que se prolongará hasta el lunes y que afectará a buena parte de la Península y Baleares, salvo Galicia y regiones cantábricas. Canarias quedará al margen hasta el fin de semana, pero a partir del sábado las temperaturas serán muy elevadas también en el archipiélago», ha avanzado Del Campo.
En esta ola de calor, según ha destacado, se superará los 40 grados ya desde este miércoles en amplias zonas del este, centro y sur de la Península, así como en puntos de Baleares. Esto ocurrirá, según las zonas, hasta el domingo o lunes.
Respecto al jueves, ha avisado de que probablemente se llegue a 42 grados en puntos del nordeste, sobre todo en el Valle del Ebro e interior de Cataluña y, principalmente, en las zonas más cercanas al río Ebro y en la depresión central de Lleida e incluso en valles pirenaicos orientados al sur. «En las jornadas álgidas de la ola de calor -viernes, sábado y domingo- en el Valle del Guadalquivir se podrían incluso rondar o superar los 44 grados», ha subrayado.
Por la noche es posible que se registren noches tórridas. Así se denomina a aquellas en las que la temperatura mínima no baja de 25 grados y esto ocurrirá principalmente en la cuenca del Ebro, zona centro y mitad sur y especialmente en grandes ciudades, donde la propia urbe genera temperaturas más elevadas que en su entorno, un fenómeno conocido como ‘isla de calor urbana’.
Además, la ola de calor viene acompañada de polvo en suspensión, ya que la masa de aire que afecta a España previamente habrá recorrido el norte de África, calentándose notablemente y cargándose de ese polvo mineral en suspensión.
Es posible, por otro lado, que durante estas jornadas tan calurosas crezcan algunas nubes de evolución a partir de media mañana en puntos del interior que incluso podrían desembocar en tormentas, generalmente con muy poca precipitación o incluso secas, pero que tendrán un aparato eléctrico y que localmente podrían dar lugar a fuertes rachas de viento.
TEMPERATURAS «EXTREMAS» E «INUSUALES»
«Ambos factores -el polvo en suspensión y la nubosidad- generan algo de incertidumbre en cuanto al pronóstico de las temperaturas, pero en cualquier caso, tanto las diurnas como las nocturnas serán muy altas, extremas, inusuales para esta época del año», ha manifestado Del Campo.
En la mayor parte de la Península, salvo a orillas del Cantábrico y también en Baleares, las temperaturas máximas estarán desde el jueves y hasta el domingo entre 5 y 10 grados por encima de lo normal para estas fechas e incluso más de 10 grados por encima de esos valores normales en puntos del nordeste y de la mitad sur.
«Aunque las temperaturas mínimas de manera general normalmente no se desvían tanto con respecto a lo normal en situaciones de ola de calor, en esta ocasión también estarán entre 5 y 10 grados por encima de lo normal para la época en muchas zonas de la Península», ha especificado.
En cuanto a Canarias, ha apuntado que se iniciará una subida de las temperaturas el jueves, que se intensificará el viernes y que hará que a partir del sábado, durante todo el fin de semana y primeros días de la próxima semana, se registren temperaturas muy elevadas en el archipiélago, con más de 35 grados en muchos puntos de las islas y temperaturas mínimas también muy calurosas.
Respecto al final de la ola de calor, ha señalado que «hay algo de incertidumbre todavía y parece que no se producirá en todas las zonas simultáneamente». El domingo posiblemente bajen las temperaturas en el tercio norte peninsular, pero todavía no se notará el alivio en la mayor parte de España e incluso podría repuntar algo el calor en puntos del Mediterráneo peninsular y Baleares.
El lunes podrían bajar las temperaturas en el norte, oeste y área mediterránea peninsular. En el Valle del Guadalquivir y puntos del sureste el calor continuaría siendo extremo, muy intenso. Ya el martes parece que podría darse por finalizada la ola de calor en general, con temperaturas altas, pero no tanto, con valores más soportables y más normales en general.
A consecuencia de las temperaturas máximas muy altas, durante estos días aparecerán avisos de nivel naranja (riesgo importante) y de nivel rojo (riesgo extremo) asociados a esas temperaturas altas en numerosas regiones del país.
Habrá que tener precaución con el índice de radiación ultravioleta que, como es habitual por estas fechas, muestra valores muy altos o extremos en casi todo el país. Además el polvo en suspensión empeorará la calidad del aire y se disparará el riesgo de incendios, que será también extremo en amplias zonas del territorio. «Estamos, por lo tanto, ante un episodio muy adverso, no sólo por las altas temperaturas, por lo que hay que extremar todas las precauciones», ha concluido.