Desde el pasado 15 de junio de 2019, Vicente Casañ se convertía en el nuevo alcalde de la capital albaceteña. Fue en estos primeros meses de mandato cuando, según afirma el periódico El Mundo, Casañ contrataba a su propia empresa desde el Ayuntamiento de la ciudad.
Se trataría, concretamente, de la empresa Veo Radio Producciones, de la que poseía el 50% de las acciones, y a la que había aprobado publicidad institucional. Según El Mundo, el alcalde había concedido al menos cinco contratos de publicidad a la empresa, por un valor superior a los 6.000€, mientras aún le pertenecían la mitad de las acciones de la empresa. Todo ello, bajo documentos firmados por su jefa del Gabinete de Prensa, Lourdes Fajardo.
No sería hasta el mes de septiembre cuando el actual alcalde vendería sus acciones en la empresa, pero no sin antes haber multiplicado los ingresos municipales destinados a la compañía. De hecho, y siempre según El Mundo, los ingresos destinados a esta empresa continuaron en aumento incluso cuando Casañ dejó de ser accionista y a pesar de la llegada de la pandemia.
Cabe recordar que la Ley Electoral prohíbe este tipo de acciones, puesto que un cargo público no puede contratar una empresa que pertenezca total o parcialmente al mismo cargo, todo ello de cara a mantener cierta parcialidad a la hora de externalizar servicios municipales.
Esto vendría a significar que Vicente Casañ debería haber vendido sus acciones antes de ser nombrado alcalde. De hecho, y según confirma el periódico, no reflejó en su declaración de bienes las acciones de la empresa y tampoco dio constancia de la venta de estas acciones.