Cuatro personas con discapacidad intelectual, todas ellas usuarias del Servicio de Capacitación de AFAS, participan desde hace semanas en una interesante acción formativa que se viene impartiendo en la Cooperativa Santiago Apóstol de Tomelloso. Estas cuatro personas, gracias a la empatía demostrada por la entidad agraria a lo largo de todo el proceso, se han convertido en alumnos del Certificado de Profesionalidad de Tareas Auxiliares de Almacén que se está celebrando en Santiago Apóstol. Se trata de una importante oportunidad para estas personas dado que, además de la formación específica de almacén, ofrece la posibilidad de cursar las competencias clave de lengua y matemáticas en su nivel II, cruciales para que cualquier persona, con o sin discapacidad, pueda continuar enriqueciendo su itinerario formativo y laboral.
Los alumnos, que reciben el apoyo de los profesionales de la Oficina de Vida Inclusiva, han superado ya tanto las competencias lingüísticas, como el módulo de preparación de pedidos. En estos momentos, cargados de ganas y de ilusión, se afanan con el módulo de operaciones auxiliares de almacenaje, que también esperan aprobar con su esfuerzo, el apoyo del Servicio de Capacitación de AFAS y la cercanía y sensibilidad del equipo docente de Santiago Apóstol.
Se trata de una experiencia muy satisfactoria para los usuarios de AFAS y sus familias, que ven cómo pueden desarrollar actividades en entornos normalizados junto a personas sin discapacidad, pero también lo es para la cooperativa, que colabora de este modo a ir dando pasos importantes para que Tomelloso sea cada día un poco más inclusivo.
Este certificado de profesionalidad, que cuenta con una beca para las personas con discapacidad, incluye el carné de carretillero, así como prácticas en empresa.