En las últimas 24 horas se han registrado dos nuevos ingresos hospitalarios por legionela en el Hospital de Manzanares, lo que eleva el número de casos registrados desde que comenzara el brote a 222, 27 de los cuales siguen ingresados, cinco de ellos en la UCI –dos de ellos mejorando y otros tres en estado grave–.
El consejero de Sanidad, Jesús Fernández, ha explicado a los medios desde el Salón de Actos del Hospital Virgen de Altagracia de Manzanares que en los últimos días han ido descendiendo los nuevos casos, lo que a su juicio hace presumir que a lo largo de esta misma semana se dejarán de registrar nuevos ingresos derivados por esta bacteria.
Ha hecho un repaso cronológico de todas las actuaciones comandadas por la Consejería que dirige desde que se detectaron los primeros casos el pasado viernes 11 de diciembre.
Así, ha recordado que a las 15.00 hora de ese día se registraron los dos primeros casos, y en un primer momento se centró la investigación en el polígono industrial, debido a que uno de estos casos desarrollaba su jornada laboral en el mismo.
Esa misma tarde se dio orden a las centros de salud cercanos de derivar las posibles infecciones respiratorias y neumonías graves, momento a partir del cual todos los casos se comunicaban al sistema de guardia de epidemiología de Ciudad Real.
El sábado 12, ha explicado el consejero, «se inspeccionaron torres de refrigeración y se enviaron los análisis a un laboratorio de Talavera de la Reina», e independientemente de si el resultado era positivo o negativo «se procedió a la limpieza y desinfección» de todas estas torres.
Ya el lunes 14, se inspeccionaron 103 puntos de riesgo con un total de 33 muestras remitidas a Talavera de la Reina. Ese mismo día se activó el protocolo por legionela desde la Consejería.
DOS «PUNTOS CALIENTES»
Los primeros resultados del día 16 de diciembre revelaban que eran todos negativos menos una torre de refrigeración en el polígono industrial y en una fuente ornamental cercana a la estación de autobuses de la localidad, ésta última «con una carga muy elevada». Desde entonces, ha precisado Fernández, «todas las fuentes siguen cerradas» por prevención.
Paralelamente se enviaron en estos días hasta 100 muestras de esputo de los afectados al Centro Nacional de Microbiología de Majadahonda para comparar con las muestras ambientales tomadas y concretar el origen de la epidemia.
El viernes 18, desde la Consejería se coordinó una videoconferencia con las gerencias de Manzanares y Ciudad Real, con los servicios provinciales de Salud Pública, los centrales del Sescam y la Dirección General competente, «donde se redactaron los protocolos», al tiempo que se aprobó «convocar cuantos refuerzos en recursos humanos y materiales fueran necesarios».
En esos días, «el brote empezó a ser fuerte» y desde el 15 al 18 «fueron los días con mayor número de personas presentando síntomas en un primer momento».
El director general de Salud Pública, Manuel Tordera, informó en rueda de prensa el día 21, día en el que se vuelven a tomar muestras de los «puntos calientes» para enviar a la universidad de Valencia junto a más muestras de esputo para su análisis.
En opinión del titular de Sanidad, la Navidad «ha entorpecido» el cultivo de los datos, pero a partir de este martes se espera que se devuelvan los resultados desde Valencia «para confirmar que la fuente ornamental y la torre de refrigeración» son la sede del primer foco.
EL 91%, RESIDENTES EN MANZANARES
Jesús Fernández ha puesto de manifiesto que el 91% de los afectados, 201 en total, son de la localidad de Manzanares. Membrilla es la siguiente localidad con más vecinos afectados, con un total de siete, mientras que hay uno o dos casos en pueblos como Campo de Criptana, Alcázar de San Juan, La Solana, Villarta de San Juan, Las Labores, Moral de Calatrava o Torralba.
Fernández ha querido transmitir un mensaje de «tranquilidad» aseverando que todas las zonas sospechosas están cerradas.
Ha dicho también que la tasa de mortalidad está siendo menor que la media, ya que solo han fallecido dos personas (un uno por ciento), mientras que lo habitual es «entre un 5 y un 10 por ciento».