El colegio Félix Grande de Tomelloso iniciaba de “forma anómala”, según la AMPA, el curso escolar. La asociación de madres y padres del colegio ofreció una rueda de prensa para dar a conocer la situación de las familias con hermanos en el centro. A pesar de la revocación de esas admisiones, que tuvo lugar en julio, cuatro familias llevaron a los niños “al colegio donde están matriculados”.
La presidenta de la AMPA, Mayte Martín, aseveró que el curso “no se inicia con regularidad” en el Félix Grande, ya que mientras no la haya para todos no se puede hablar de regularidad. Explicó que un grupo de familias “han pasado un verano terrible, sufriendo mucho”. Contaban con el compromiso firme de todos los estamentos, Ayuntamiento, delegación de la Junta, delegación de Educación y el propio consejero Felpeto, relataba Martín, de que los alumnos nuevos con hermanos en el centro iban a tener plaza. En un principio se iba a contar con un aula, después fueron dos las propuestas, dijo la presidenta y, cuando las cosas estaban tranquilas a finales de julio, las familias se enteraron que no entraban en el mismo colegio que sus hermanos. Se les ha adjudicado otro, manifestaba Mayte Martín, y algunas de esas familias han matriculado a los niños en el colegio afectado y otras van a ir por la vía judicial.
La presidenta de la AMPA afirmó “que el acoso y derribo que hay contra el colegio es desproporcionado y deleznable”. Auguró que “ya se verá dentro de unos años” porque “si fuera tan fácil ‘desvotar’ como es desdecirse de la palabra de uno no tendríamos las misas caras al mando de esta región”.
Marina Jiménez, una de las madres afectadas por la situación, explicaba que los padres con hijos en el colegio decidieron llevarlos al centro “porque están matriculados en periodo ordinario” y no están en el periodo extraordinario de matriculación. Jiménez señalaba que “que a día de hoy”, la matrícula de esos alumnos “aparece en la web Delphos Papas”. Mientras eso sea así, declaró, “nuestros hijos van a hacer el periodo de adaptación en este colegio”.
“Si es tan fácil anular una matrícula, que la anulen ellos”, señalaba la madre, y así, “en el momento en que nuestros hijos no tengan matrícula ya tomaremos las medidas necesarias”. En ese sentido, aseguraba que “nosotros hicimos la matricula bien, no cometimos el error, el error lo cometió la administración”. La única solución que les dejan, señalaba Marina, es “ir al contencioso-administrativo”. Pero, mientras se resuelve el recurso “¿por qué no dejan a mi hija y al resto de los niños con sus compañeros y con sus hermanos en el Félix Grande y si perdemos los cambiamos?”. La madre pidió al consejero “que venga y le explique a mi hija porque no viene al colegio de su hermano, él que me dijo que no iba a tener problemas”.
Marina, para acabar, aseguró que, sus hijos harán en el colegio Félix Grande el periodo de adaptación durante todo el tiempo mientras la consejería de Educación “no anule la matrícula”.
Como se sabe, la consejería de Educación ofreció la posibilidad de que los nuevos alumnos con hermanos en el centro pudiesen matricularse, por lo que se aceptaron 32 solicitudes de matrícula, en dos aulas y con dos maestros. Hubo familias que interpusieron un recurso de alzada, dado que con 2 profesores se podría aumentar el cupo de admitidos. Ante ello, la administración anuló el proceso de admisión de los alumnos con hermanos. Preguntada por este periódico, Marina Jiménez aseguró que los padres que presentaron ese recurso están “en su derecho” y que la anulación de proceso de admisión “está por detrás del momento en el que nos encontramos”, ya que las plazas estaban adjudicadas y “los alumnos matriculados en el centro”.
Para la presidenta de la AMPA se trata de “un mensaje terrible” el que se le trasmite a la ciudadanía si por reclamar se eliminan “derechos adquiridos”. Martín explicó que de los 7 niños admitidos en principio, 3 de ellos han sido matriculados en los centros que les asignaron con posterioridad.
