La Guardia Civil ha detenido a F.N.C., de 20 años de edad, por un delito de detención ilegal y otro de amenazas cometido en la localidad de Illescas (Toledo). El detenido, junto con otro hombre que esta plenamente identificado y sobre el que pesa una orden de detención, retuvo a una persona contra su voluntad durante varias horas, durante las cuales fue amenazada.
El pasado mes de mayo, el Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Illescas se hizo cargo de la investigación de los hechos denunciados, ante la Guardia Civil de esa localidad, por un hombre que manifestó haber sido víctima de un supuesto delito de detención ilegal y amenazas en ese municipio, que dieron origen a la Operación Landareak.
Según ha informado la Delegación del Gobierno en un comunicado, esta persona informó a los agentes de que dos hombres lo obligaron a subir al interior de un vehículo, con amenazas, cuando se encontraba en una de las calles de Illescas y lo llevaron hasta una vivienda ubicada en un bloque de pisos de la localidad de Cedillo del Condado.
La víctima informó a la Guardia Civil que durante el tiempo que estuvo retenido fue amenazado e interrogado por estos hombres sobre un robo de plantas de marihuana cometido en una vivienda de la urbanización El Señorío de Illescas y que también pudo ver un arma corta en esta vivienda, sin poder precisar si era real o simulada. Pasadas unas horas lo volvieron a subir a un vehículo y lo trasladaron hasta la localidad de Illescas.
Este Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil averiguó el paradero del vehículo utilizado por estos delincuentes, así como la ubicación exacta de la vivienda en el que la víctima había estado retenida, un piso ocupado donde estas personas vendían estupefacientes.
La Guardia Civil identificó a F.N.C. y J.F.E., como autores de estos hechos, localizando al primero de ellos en un gimnasio de la localidad de Illescas, lugar en el que fue detenido por un delito de detención ilegal y otro de amenazas. Tras ser puesto a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de este municipio, su titular ordenó su ingreso en un centro penitenciario.
Sobre J.F.E., el segundo autor de estos hechos, pesa una orden de búsqueda y detención en vigor.
