El consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez, ha anunciado que una vez cerrados los pagos de la Política Agraria Común (PAC) con fondos europeos correspondientes al año 2015, la región ha repartido 650 millones de euros, 15 millones menos que el año anterior, lo que se traducirá en una pérdida de 90 millones en el conjunto de los seis años del periodo vigente de pagos que se extiende hasta 2020.
Así lo ha adelantado Martínez Arroyo en rueda de prensa antes de presentar estos datos ante el pleno de las Cortes de Castilla-La Mancha, donde ha asegurado que esta pérdida de fondos repercutirá en que cada agricultor reciba un 21% menos en derechos por hectárea, ya que cada una «pasará a valer de 199 euros a 156».
«Esta reducción global de 90 millones de euros se debe a la negociación que hizo el Gobierno anterior del PP, que presumió de haber defendido los derechos de los agricultores, y a pesar de esa defensa van a perder dinero», ha criticado.
CASI 220 MILLONES INGRESADOS POR 2016
En otro orden de cosas, ha avanzado que este mismo jueves se han liberado los anticipos del 50% de los pagos básicos y pagos verdes, con un total de 219 millones de euros para un total de 53.000 perceptores castellano-manchegos.
Este «esfuerzo» de la Comunidad Autónoma se verá complementado el viernes día 4 de noviembre, cuando se adelantará el 70% de estos pagos a los pequeños agricultores, en cuantías no superiores a 1.250 euros. «Es una fantástica noticia. Ninguna Comunidad Autónoma ha podido hacerlo», ha celebrado Martínez Arroyo.
Además, ha puesto de manifiesto que la PAC «irá dirigida a los que se juegan su dinero», por lo que se han puesto en marcha medidas como el requisito de que aquellos ganaderos que reciban ayudas por la explotación de pastos se dediquen realmente a la ganadería.