Vecinos de Tomelloso opinan sobre la polémica cámara: algunos la ven necesaria para la seguridad vial, otros creen que debería calibrarse mejor.
En Tomelloso, hay un tema que estos días está en boca de todos: el semáforo con cámara instalado en la avenida Antonio Huertas, que ya ha provocado numerosas multas y abierto un debate en el municipio. En este nuevo episodio de Tomelloso Opina, el periodista Víctor Caro ha salido a la calle para conocer de primera mano qué piensan los vecinos sobre esta medida.
Concienciar para una conducción más segura
Aunque las multas duelen (200 euros y 4 puntos del carné si no se paga con descuento), muchos vecinos reconocen que la cámara tiene un efecto claro: está haciendo que la gente respete más el semáforo.
“Hay quien por la noche se lo saltaba sin pensar, ahora ya se lo piensan dos veces”, comentaba Iván. José, profesor de autoescuela, lo explicaba de manera pedagógica: “El ámbar es para anticiparse y reducir velocidad. Es un aviso, no una invitación a acelerar”.
Gonzalo, otro vecino, aportaba una reflexión interesante: “Lo ideal sería no necesitar cámaras, pero si con esta medida conseguimos que la gente respete más, bienvenida sea”.
Los puntos críticos: calibración y duración del ámbar
Eso sí, muchas voces piden que la transición entre el ámbar y el rojo esté mejor calibrada. Algunos consideran que dura poco y puede provocar frenazos bruscos: “Se corre la voz, la gente frena en seco, y eso puede ser peligroso”, explicaba Santos, que ya ha recibido su multa.
Otros vecinos, como Antonio, transportista, reconocían que tras ver el vídeo de su propia infracción “no quedaban dudas de que el semáforo se había pasado en rojo”. Aun así, también sugería que habría sido mejor priorizar otras inversiones en seguridad vial.
¿Dónde ubicar este tipo de cámaras?
Otra cuestión que surgió es si la cámara está situada en el lugar más adecuado. Algunos vecinos opinan que hay cruces con peor visibilidad o más conflictivos donde esta tecnología tendría aún más sentido.
“En calles con más accidentes sí lo vería muy positivo”, comentaba Santos. Gonzalo coincidía: “Si sirve para concienciar, ponerlas en puntos estratégicos puede ser útil”.
Un tema que ha hecho reflexionar a muchos conductores
Más allá de las multas, lo que sí parece claro es que la instalación de esta cámara ha servido para generar un debate sobre el respeto a las normas de tráfico. Como decía uno de los vecinos entrevistados: “Al final, si todos cumpliéramos las normas no harían falta cámaras”.
Mientras tanto, los tomelloseros piden que se tenga en cuenta el equilibrio entre seguridad y sentido común, para que las medidas no resulten injustas en situaciones especiales como una urgencia.