En Tomelloso, la tradición belenística se vive con pasión y maestría. Este año, desde entomelloso.com hemos recorrido cuatro belenes destacados, mostrando cómo la creatividad y el cariño transforman estas obras en símbolos navideños únicos. Desde la Residencia San Víctor hasta el monumental trabajo de José María Olmedo, cada belén tiene su historia y personalidad.
Un belén lleno de amor en la Residencia San Víctor
El recorrido comenzó en el belén de la Residencia San Víctor, donde Sor Sagrario explicó cómo este nacimiento se realiza pensando en sus principales espectadores: los ancianos y los niños. “Lo preparamos con mucha ilusión, representando la humildad y sencillez del misterio de Jesús”, afirmó. Este belén, que ha recibido visitas como la del colegio Santo Tomás, recrea las escenas bíblicas con un enfoque especial en los pastores y la Epifanía. Sor Sagrario agradeció la ayuda de los tomelloseros durante la pandemia y animó a todos a visitarlo: “Abrimos cada día a partir de las 11 y por la tarde hasta las 20:00”.
Manolo Casero y Félix Godoy dan forma al legado de Ángel Luis Moreno
El siguiente destino fue el centro parroquial de la Asunción, donde Manolo Casero y Félix Godoy han dado vida a un belén de más de cinco metros realizado con las figuras que fue coleccionando a lo largo de su vida el recordado Ángel Luis Moreno, prácticamente todas a estreno. “Empezamos desde cero y trabajamos dos meses, cada tarde”, relató Casero. Este belén destaca por su realismo, con un río que inicialmente presentó algún problemilla y un sistema de luces programado para alternar entre día y noche. “Queríamos un efecto bonito y logramos que las luces resalten los detalles de las montañas y las escenas”.
La innovación y la emoción de Antonio Ligero
Antonio Ligero, un veterano belenista, continúa sorprendiendo con su capacidad de innovación. Este año, su obra incluye elementos como el infierno, representando la victoria del bien sobre el mal, y un homenaje a los abuelos con figuras que simbolizan su papel en nuestras vidas. “Siempre pongo el nacimiento de mi abuela; es la pieza más especial para mí”, confesó emocionado. Antonio apuesta por el uso de materiales reciclados, desde corchos o estropajos, logrando que cada rincón tenga una historia detrás. “El Belén es nuestra tradición, une familias y nunca debemos perderlo”. (Calle Santos Burillo, 12).
La monumentalidad del belén de José María Olmedo
El recorrido finalizó en el belén de José María Olmedo, un proyecto que comenzó en 2010 y refleja un impresionante trabajo artesanal. “Construyo todo desde cero, utilizando materiales reciclados como tubos de cartón o imanes de frigorífico”. Este belén recrea cuatro ciudades bíblicas: Nazaret, Belén, Egipto y Jerusalén, integrando escenas como el juicio de Cristo o la presentación en el templo. “Cada figura tiene su historia; muchas las he rescatado y adaptado”. (Calle Oriente, 40).
Mantener la tradición
Los belenistas de Tomelloso coinciden en la importancia de mantener viva esta tradición. Desde la sencillez hasta la monumentalidad, cada belén cuenta una historia que conecta generaciones y celebra la esencia de la Navidad. Antonio Ligero incluso sugirió una ruta oficial de belenes en Tomelloso, afirmando: “Es algo que nos une y debemos preservar”.
Los belenes estarán abiertos al público durante toda la temporada navideña, ofreciendo una oportunidad única para disfrutar de la creatividad y la espiritualidad de estas obras.
