El 28 de junio, como cada año, nos reunimos para celebrar el Día del Orgullo LGTBIQA+, una jornada en la que recordamos la lucha incansable por la igualdad y los derechos humanos. En este día especial, alzamos nuestras voces para afirmar que el amor, la identidad y la diversidad no son problemas que deban ser corregidos, sino celebrados. Estamos aquí para recordarle al mundo que el problema no es ni cómo ni a quien amamos, ni quiénes ni cómo somos, sino que este radica en la intolerancia y el odio que aún persisten en nuestra sociedad.
Como dijo Audre Lorde, “Es el privilegio de la mayoría el que no quiere que el mundo cambie, porque su posición es segura y cómoda“. Estas palabras resuenan hoy más que nunca. No es nuestra orientación sexual, ni nuestra identidad de género lo que constituye el problema. El verdadero obstáculo es la homofobia y la transfobia de una sociedad que se aferra a conceptos obsoletos de lo que considera “normal.
En un mundo en el que la intolerancia y los mensajes del odio hacia todo lo que no está dentro de lo “normativo” no paran de crecer, es bueno recordar que los derechos y las libertades que se disfrutan hoy día no siempre han estado ahí, si no que han sido el fruto de la lucha de muchas personas que pusieron su cuerpo y su vida para que hoy sean una realidad.
Para celebrar este día, la Asociación Las Terreras, en colaboración con Cines la Dehesa, pondrán el jueves 27 de junio a las 21:15 la película «Te estoy amando locamente», con precio especial de 4’50€.
Esta película recuerda los tiempos de lucha del colectivo lgtbiq+, en tiempos no tan lejanos. Se recrea en 1977 (hace 47 años), cuando existía la ley sobre peligrosidad y rehabilitación social, que incluía penas de hasta cinco años de internamiento en cárceles o manicomios para los homosexuales y demás individuos considerados peligrosos sociales para que se «rehabilitaran».
Porque es bueno recordar la historia para no repetirla. Porque la educación y el conocimiento son los pilares básicos para intentar no retroceder a épocas que muchos insisten en imponer de nuevo. Porque frente a la censura y el bloqueo de la cultura y el arte, más defensa de nuestros derechos y libertades, y porque frente al blanco y negro, siempre, siempre un gran arcoíris en el que tod@s somos bienvenid@s. Por eso creemos que esta película, es tan necesaria de ver.
