El presidente del Partido Popular de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, ha mantenido este martes una reunión con el presidente regional, Emiliano García-Page, para abordar los próximos pasos en común a dar para garantizar la tramitación del inminente nuevo Estatuto de Autonomía pactado entre ‘populares y socialistas’, una cita en la que ha subido la apuesta y ha reclamado al Gobierno regional otros seis pactos adicionales.
En rueda de prensa, ha detallado que el primero pasaría por retomar, cuatro años después, el Pacto del Agua alcanzado en el pasado mandato y que en su opinión no ha avanzado más allá de su firma.
De ahí que ahora el líder ‘popular’ aproveche la inercia del consenso para reclamar cumplir ese pacto, al que ha añadido «cinco grandes acuerdos más» en materia de Bienestar Social, Economía, Promoción de Castilla-La Mancha, Juventud y Fiscalidad.
«CREEMOS EN LA AUTONOMÍAS»
Ha defendido al PP como un partido que «cree en las autonomías y en los castellanomanchegos», al tiempo que ha mostrado su «orgullo» por liderar la oposición en un momento como éste.
Un PP «útil, eficaz, y en el que perfectamente pueden confiar el conjunto de los castellanomanchegos, sin improvisaciones, sin estridencias y sin ruido».
Unas cualidades que ha hecho extensivas al hecho de que los ‘populares’ creen en el acuerdo y en la negociación, un «espíritu que ha presidido siempre» al PP, lo que ha servido para conseguir el futuro Estatuto de Autonomía.
Tras negociar con «lealtad» el nuevo texto con el PSOE, ha avanzado el obvio voto positivo el próximo jueves en el debate parlamentario que servirá para abrir oficialmente las puertas a la tramitación de la futura Carta Magna.
«La vocación política que yo siempre he desarrollado es la de consensuar, dialogar, hacer partícipe a la sociedad civil», ha indicado, razón por la cual va a abrir una ventana para que haya aportaciones ciudadanas.
Sobre el fondo del Estatuto, ha destacado «asuntos muy importantes», como el hecho de que recoja «el espíritu de la concordia de la transición, para que esos valores y principios estén recogidos también aquí».
El «respeto a las instituciones fundamentales»; la separación de poderes, la solidaridad entre territorios o «la capacidad de demostrar que Castilla-La Mancha no es menos que nadie» hacen del Estatuto «un mecanismo útil para defender a la región frente a otras autonomías».
FINANCIACIÓN COMO LÍNEA ROJA
Una de las líneas rojas para el PP era conseguir este extremo, para que Castilla-La Mancha «tenga la financiación que se merece y las infraestructuras que necesita».
Una financiación justa y solidaria participada con el resto de autonomías; emprendimiento; diálogo social; o cómo defender la igualdad entre hombres y mujeres; son algunos de los puntos ensalzados por Paco Núñez.
Entiende el líder del PP que «todo lo que contempla el Estatuto se desarrollará con otro tipo de acuerdos parlamentarios», algo vital, ya que se habla de «sanidad, educación o vivienda» como «asuntos vitales».
Por ello, en paralelo tendrá que desarrollarse la normativa adecuada para que haya «una traslación real al castellanomanchego de a pie».
APOYO GARANTIZADO
Paco Núñez ha dado por garatizado el apoyo del PP en el tramitación en el Congreso necesaria para dar luz verde definitiva a este texto.
En todo caso, y en materia de reforma de ley electoral, ha avisado que no saldrá adelante si no es con el consenso entre PP y PSOE, ahora que la nueva redacción del Estatuto abre el abanico hasta la posibilidad de elegir 59 diputados.
GUIJARRO NO VE INCONVENIENTE EN ALCANZAR ACUERDOS
El vicepresidente primero de Castilla-La Mancha, José Luis Martínez Guijarro, ha defendido que el Gobierno autonómico tiene como seña de identidad la posibilidad de llegar a acuerdos desde que se instaló en el Palacio de Fuensalida en 2015, por lo que no ve inconveniente en explorar más vías para pactar con el Partido Popular.
En rueda de prensa tras la reunión entre el presidente regional del PP, Paco Núñez, y el jefe del Ejecutivo autonómico, Emiliano García-Page, ha respondido a la propuesta del líder ‘popular’ enunciada minutos antes, asegurando que «gobernar desde el diálogo con la sociedad es norma de la casa» desde que García-Page gobierna.
«Poder llegar a acuerdos no solo no tiene inconveniente, sino que además sería lo deseable», ha señalado Martínez Guijarro, después de que el PP haya propuesto más allá del Estatuto otros acuerdos en materia de fiscalidad o agua.
UN ACUERDO DISCRETO
Martínez Guijarro ha destacado que este gran acuerdo nace de lo discreto de las reuniones entre PP y PSOE, que han servido para conformar la «mejor herramienta» para Castilla-La Mancha, que vendrá a «garantizar los servicios públicos» en la Comunidad Autónoma.
Un Estatuto que blinda derechos y que, además, «garantiza la igualdad de oportunidades de los ciudadanos», una de las «grandes características» del texto.
Blinda el diálogo social y «establece en la arquitectura institucional el Consejo de Diálogo Social», que tendrá «funciones importantes de cara a la construcción de las futuras leyes».
Además, mejora la capacidad de gobierno y «va a permitir construir una Comunidad Autónoma con conceptos de la sociedad del siglo XXI para un nuevo tiempo».
Y todo ello «con vocación de permanencia en el tiempo, para las próximas dos generaciones» en la Comunidad Autónoma, y que vendrá aparejado de más normativa para desarrollar todas las premisas acordadas, además de un nuevo Reglamento de las Cortes.