El Sindicato de Trabajadores y Trabajadoras de la Enseñanza de Castilla La Mancha (STE-CLM) rechaza la jornada partida en los centros educativos, ya que considera que «es una forma de acostumbrar a los futuros trabajadores a jornadas interminables».
En este sentido, el sindicato ha explicado en nota de prensa que «quienes defienden la jornada partida consideran que resuelve las desigualdades entre el alumnado y mejora los resultados académicos», pero han puntualizado que «en ningún caso da respuesta a los problemas del estudiantado más desfavorecido a nivel económico y cultural».
Asimismo, STE-CLM ha mostrado su preocupación ante la imposición de la jornada partida para los nuevos centros escolares públicos de la Comunidad de Madrid, tal y como ha anunciado la presidenta de esta región, Isabel Díaz Ayuso.
Por su parte, ante el llamamiento que hizo la Consejería de Educación debido a la falta de profesorado en 64 especialidades de Secundaria, la organización sindical ha hecho hincapié en que la falta de docentes «no justifica que la Administración educativa no exija el Máster de Educación como requisito». Una situación que hasta la fecha no se ha dado en la etapa de Infantil y Primaria.
En este contexto, el sindicato ha destacado las «pésimas condiciones laborales» a las que se ven sometidos los docentes: «El profesorado no tiene tiempo suficiente para preparar las clases y, además, tiene que hacer frente a un incremento de la burocracia. Al fin y al cabo, educar está empezando a dejar de ser una opción atractiva en nuestro país», según STE-CLM.
Al hilo de ello, el sindicato ha recalcado que, según un informe publicado por la UNESCO en 2023, las tasas de abandono de los docentes en Primaria se duplicaron en todo el mundo, pasando del 4,6% al9 %. Además, independientemente del nivel de renta del país e incluso de la remuneración, el informe refleja que los docentes abandonan la profesión en los primeros cinco años de ejercicio.
Una situación calificada por STE-CLM como «The Great Resignation», un término acuñado en 2021 por el profesor de la Universidad de Texas, Anthony Klotz, que quiere decir «la gran dimisión». Esta terminología ha llegado años después al sector educativo para reflejar «el desencanto del profesorado hacia la tarea de enseñar, un sentimiento que se ha intensificado con la nueva medida que se quiere aplicar», según la organización sindical.
Por último, el sindicato ha concluido que «si finalmente se aplica la jornada partida, no tendrá un impacto positivo en el sistema educativo porque ni la educación es un mercado, ni las desigualdades sociales se erradican partiendo la jornada».
