El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha expresado una vez más su contundente oposición al acuerdo alcanzado entre el PSOE y Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) sobre la financiación de Cataluña. Durante su intervención en el Comité Federal del PSOE, celebrado en la sede de Ferraz, García-Page ha arremetido duramente contra el pacto, al que ha tildado de «indefendible» y «más egoísta que socialista».
El líder castellano-manchego ha dejado claro que no ha recibido comunicación oficial del contenido del acuerdo y que su principal intención es obtener una copia del documento firmado. «A estas alturas conmigo no hace falta que hablen. Me vale con que me den una copia del acuerdo firmado», ha señalado, subrayando su sorpresa por el hecho de que «todo el mundo hable de que se va a cumplir lo firmado» sin que él haya visto el documento.
«Es grave desde la perspectiva constitucional y grave desde la perspectiva de los valores socialistas»
García-Page ha denunciado que el pacto refleja lo que él ha denominado «cupón independentista» y ha afirmado que este tipo de acuerdos atentan contra los principios constitucionales y socialistas. «Es grave desde la perspectiva constitucional y grave desde la perspectiva de los valores socialistas», ha sentenciado, mostrando su preocupación por los efectos de este acuerdo en la igualdad de los territorios.
Además, ha criticado lo que considera una manipulación al comparar estímulos fiscales en provincias como Cuenca, Teruel o Soria con los beneficios que, a su juicio, se pretenden conceder a Cataluña. «Escuchar que se comparan estímulos fiscales de 10 millones de euros en esas provincias es o una broma o literalmente un intento de confundir a la gente», ha asegurado con ironía.
García-Page también ha aprovechado para enviar un mensaje a Salvador Illa, nuevo presidente de la Generalitat de Cataluña, reconociendo su capacidad política pero marcando sus diferencias. Aunque ha destacado que Illa ganó las elecciones con una estrategia incluyente, ha señalado que su propio enfoque es distinto y que no comparte el planteamiento que se está manejando en Madrid.
Finalmente, el presidente de Castilla-La Mancha ha llamado a una mayor autocrítica dentro del PSOE, insistiendo en que el partido es «mucho más importante que los dirigentes de hoy y del pasado» y ha lamentado la falta de debate interno, destacando la necesidad de que la izquierda sea capaz de criticar y discrepar para avanzar.
Este duro posicionamiento de García-Page añade tensión dentro del partido y refuerza su imagen como uno de los principales barones socialistas críticos con las políticas de Pedro Sánchez en relación con Cataluña.
