El sexagenario acusado de abusar sexualmente en Tomelloso de una menor, que actualmente tiene 18 años, ha negado los hechos afirmando que «no tenía apetencia sexual porque tuvo una operación de miocardio» y que «no podía hacer ningún tipo de esfuerzo por recomendación del médico».
Así lo ha manifestado el encausado durante un juicio celebrado en la Audiencia Provincial de Ciudad Real este miércoles bajo servicios mínimos por la huelga de funcionarios de justicia secundada desde el 17 de abril.
A preguntas de su abogado, el encausado -que se ha negado a responder a la Fiscalía y a la abogada de la acusación- ha dicho que sufre diabetes crónica y que «tiene una vasectomía mal hecha» que ha provocado que «desde entonces, tenga disfunción eréctil». «No podía hacer ningún tipo de esfuerzo, por recomendación del médico. Me dijo que me podía dar un infarto o cualquier otra cosa», ha añadido.
Con relación al tiempo que supuestamente pasaba la víctima en casa del acusado, ha dicho que «iba a ver los perros y a las gallinas que las tenía en el corral». «Cuando ella estaba de visita, mi nuera la atendía», ha dicho añadiendo que «solo pasaba unos 5 o 10 minutos en casa».
Igualmente, ha afirmado que «todo es una patraña que han buscado ella o la madre para sacar dinero» y que «presume que la mentira la inventó la madre». En este punto, ha continuado afirmando que la víctima «estaba siempre en la calle jugando al fútbol con los muchachos y esas cosas» y que es conocida en el barrio como alguien «que mentía continuamente».
EL AGRESOR DABA DINERO A LA VÍCTIMA
Tras estas declaraciones, la víctima ha contado que conoció al acusado «porque iba a un parque que estaba muy cerca de casa donde iba con su hermano y amigos del barrio a jugar» y que el hombre «les invitó a unos helados». «A partir de ese día empecé a ir yo sola» ha dicho antes de relatar los abusos que habría sufrido desde 2016 hasta 2020.
Asimismo, ha asegurado que el acusado le daba «10, 15 o 17 euros cada vez que iba a su casa». «Yo iba y, después de pasar lo que pasaba, me decía que si contaba algo, ya verás lo que le va a pasar a tu madre y a tu abuela», ha respondido a preguntas de la Fiscalía.
«Hubo una temporada que discutía mucho con mis padres y con mi hermano, mis padres me preguntaban de dónde sacaba el dinero y yo les decía que me lo habían dejado mis amigos pero nunca les dije que él me daba dinero», ha añadido.
La víctima ha continuado su relato contando que «cuando le pasó aquello, hacía trastadas por la calle, discutía con su madre, pegaba puñetazos a todos lados y se rajaba en un brazo con un cuchillo».
Durante el juicio, han declarado en calidad de testigos los padres y hermanos de la víctima, que han coincidido en las versiones. Así, han afirmado que cuando salía de casa «se ponía muy nerviosa». «Notamos que su comportamiento no era normal desde que cumplió 12 años, siempre fue una niña muy cariñosa», ha relatado el padre, que denunció los hechos en junio de 2016.
ACUSACIÓN
La Fiscalía sostiene que el acusado, de 62 años de edad en el momento de los hechos, habría abusado de la entonces menor y requerido que tuvieran relaciones sexuales completas durante cuatro años.
En junio de 2020, se dictó por el Juzgado número 1 de Tomelloso un auto en el que acordaba la prisión provisional comunicada y sin fianza del acusado, quedando en libertad el 23 de julio con la prohibición de acercarse a menos de 100 metros de la víctima.
Por estos hechos piden 12 años de prisión así como incomunicarse y no acercarse a la víctima durante 13 años a menos de 200 metros. Además, deberá pagar una indemnización a la afectada con 20.000 euros por daños morales.
El juicio continuará este jueves con una prueba pericial de la psicóloga que atendió a la víctima tras los hechos y que declarará en calidad de testigo.