El alcalde de Tomelloso, Javier Navarro, ha elevado las reivindicaciones que desde su Ayuntamiento plantea al Gobierno de Castilla-La Mancha, y que pasan en primer lugar por reclamar la puesta en marcha de servicios de comedor escolar en todos los centros de la localidad, dos de ellos de forma urgente.
En una entrevista con Europa Press, ha apuntado que todos los que operan en la ciudad deberían contar con este servicio, y a día de hoy hay varios de ellos sin ofrecerlo, como el Virgen de las Viñas, el de Maternidad, San José de Calasanz o Topete.
El mismo Ayuntamiento se comprometería a acometer las obras necesarios para este efecto y a comprar los inmuebles que hagan falta para que el Gobierno castellanomanchego los termine de equipar. «No queremos ponernos de perfil».
Sin dejar de lado reivindicaciones que vienen de tiempo atrás, como la instalación de Unidad de Cuidados Intensivos en el hospital, algo para lo que el PP presentó una enmienda por valor de 5,7 millones de euros a los presupuestos generales de la Comunidad Autónoma que acabó rechazada por la mayoría socialista, como todas las demás propuestas parciales a las cuentas.
Misma suerte corrió otra de las enmiendas ‘populares’ que reclamaban rematar con 5 millones de euros el plan funcional del centro hospitalario, lo cual se mantiene entre las reivindicaciones del primer edil tomellosero.
El centro de salud número 1, «una propuesta del año 2016 de la que sólo hay el esqueleto de hormigón»; o más líneas que conecten por autobús la localidad con todas las capitales de provincia son otras de las peticiones enumeradas por el alcalde.
Javier Navarro también ha puesto deberes al nuevo Gobierno formado por Pedro Sánchez, como la necesidad de implementar un servicio de Extranjería en la comisaría de Policía Nacional, toda vez que la ciudad es «receptora de inmigración» de personas que vienen a trabajar en construcción o en el campo.
Un nuevo edificio para los juzgados, o mejorar servicios de la Tesorería General de la Seguridad Social se cuelan en la lista de peticiones.
IMPARTIR ENOLOGÍA EN TOMELLOSO
El primer edil de la ciudad de Tomelloso ha considerado además la necesidad de que la ciudad pueda acoger los estudios universitarios aprobados en los últimos tiempos en la Universidad de Castilla-La Mancha del Grado en Enología.
«Si en algún lugar debió montarse ese grado, era en Tomelloso. Nadie tiene dudas de que el grado de Minas esté en Almadén. Y Tomelloso es la mayor localidad productora de vino. Es aquí donde deberían albergarse esos estudios», ha indicado. A nivel educativo también plantea la mejora de estudios musicales.
Con todo, defiende que Tomelloso es la octava ciudad más grande de Castilla-La Mancha, por lo que entiende que «no es lógico que cuando queremos ir al Seprona, tengamos que ir a Socuéllamos; cuando necesitamos ir a la Seguridad Social, coger el tren o ir a la unidad de atención a víctimas de violencia de género, vamos a Alcázar; y cuando hay que ir a la Fiscalía, vamos a Manzanares».
REUNIÓN CON PAGE
Para todas estas peticiones, Javier Navarro ha pedido reunión formal con el presidente regional, Emiliano García-Page, que ya se ha reunido con el resto de principales alcaldes de Castilla-La Mancha.
Antes de eso, ha avanzado que ya se agendó una reunión con la delegada el Gobierno en la provincia, Blanca Fernández, «que se pospuso por temas personales».
Pero, «hoy por hoy, no se entendería que el octavo alcalde de Castilla-La Mancha no se haya reunido en los primeros seis meses» con el presidente.
Incluye como crítica el hecho de que hasta en cuatro ocasiones, según su relato, le ha faltado respuesta ante su petición de reunión con el consejero de Sanidad, después de haber anulado una primera cita «que no se ha vuelto a comunicar».
Eso sí, ha elevado agradecimiento a los consejeros de Fomento y de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Nacho Hernando y Julián Martínez, que sí que han atendido su llamada.
SIN AMBICIÓN POLÍTICA MÁS ALLÁ DE LA ALCALDÍA
En otro orden de cosas, Javier Navarro, que acaba de cumplir su primer semestre con el bastón de mando, ha asegurado que su intención política se limita a prestar servicio como alcalde.
«Mi vida política se acabará cuando deje de ser alcalde. Yo soy profesor de matemáticas y amo mi vocación de docente. Mis padres se deslomaron para pagar esos estudios y soy profesor desde 2008», ha resaltado.
Recuerda en este punto que fue el Partido Popular quien el encargó asumir el reto, y ahora la intención es que cuando deje la Presidencia del Ayuntamiento, los vecinos le recuerden «por devolver a Tomelloso al lugar al que nunca dejó de pertenecer».