En los viajes en autobús, en la época del colegio, solíamos cantar al llegar al pueblo: «Somos de Tomelloso, un pueblo mu señalao…», con la gracia y alegría de la vuelta a casa.
Y es que esta es nuestra patria chica, nuestra morada, de la que nos sentimos muy orgullosos y orgullosas y de la que solo nosotros, «los y las del pueblo» de toda la vida, y los felizmente asentados en él, nos podemos quejar. Y nos quejamos, pero que no la critique ni un «forastero», porque en ese caso lo defendemos con uñas y dientes diciendo que somos únicos, que somos lo mejor. Un orgullo tomellosero hecho a base de gente honrada, emprendedora y trabajadora. Es verdad que tenemos nuestras propias manías, nuestro propio idioma, nuestras costumbres, cosas que marcan la diferencia con el resto, y a mucha honra.
Y para él queremos la excelencia, queremos mejores servicios, queremos miles de actividades, tanto culturales como deportivas, queremos más diversidad de estudios educativos. Queremos un hospital, no solo un edificio, que se dote de UCI, medios humanos, y un plan funcional al 100 %, porque no somos menos que otros habitantes de la región. Nos dan igual los colores, hay que pedir siempre… Porque somos de Tomelloso… Un pueblo (ciudad) que se merece lo mejor.
Posdata: Y recuerda, vayas donde vayas, siempre te encontrarás con un tomellosero/a.
