Existen muchos factores que pueden resultar en la perdida de los ahorros, pero para muchos el problema recae en que nunca llegan a ahorrar dinero en primer lugar. Muchos psicólogos han intentado dar con la causa de porqué a algunos les cuesta ahorrar más que a otros, y estas son las conclusiones a las que han llegado.
Antes que nada, el ser humano suele priorizar las necesidades del momento sobre las que vendrán en el futuro. Es por eso que muchas personas, si no tienen una visión clara del porqué de esos ahorros, simplemente no lo consideran como algo importante. Tener una meta, ya sea jubilación, o fondo de contención en caso de perder el trabajo, ayuda mucho a la hora de separar ese dinero todos los meses.
Si lo que les impide ahorrar es, en cambio, una sensación agobiante por todo el dinero que deberán reunir para un gasto extraordinario, lo recomendable sería dividir la meta en partes más pequeñas. A veces la parte más difícil es empezar, y, de la misma manera que no te anotas en una maratón sin antes correr una carrera más corta como práctica, lo mejor que se puede hacer es empezar con cifras pequeñas, hasta que uno se siente más cómodo con la idea de separar más dinero mes por mes.
Para muchos, el problema recae en el hecho de que no tienen ningún excedente en sus cuentas bancarias al finalizar el mes. Esto puede ser debido a los aumentos de costo de vida que trae la inflación, o simplemente, falta de planificación financiera. Si uno quiere saber dónde puede achicar gastos para lograr ahorrar algo de dinero todos los meses, el primer paso es estudiar a fondo los resúmenes bancarios. ¿En que se gasta todos los meses? Poco a poco, se empezarán a destacar tendencias de gasto, y con la ayuda de una aplicación o una plantilla de Excel, se podrá armar un presupuesto realista y práctico.
Existen muchos modelos presupuestarios que sirven para incrementar los ahorros, pero si alguien quiere priorizar el ahorro sobre todas las cosas, el modelo más indicado es el “pay yourself first”, o pagarse a sí mismo primero en español. Simplemente consiste en establecer un monto, que puede ser fijo o no, y depositarlo en una cuenta de ahorro ni bien la persona recibe su sueldo. Luego, se distribuye el dinero restante en los gastos necesarios, como alimentos, alquileres y entretenimiento, como a uno le guste.
Si lo que uno busca es, en cambio, ahorrar para esas vacaciones soñadas, el modelo 50/30/20 es el indicado. Con este modelo, se destina el 50% para gastos necesarios como alimentos y vivienda, 30% para gastos personales como pasatiempos y ropa, y 20% para ahorros y amortización de deudas. En la plataforma financiera Moneezy.com puedes encontrar una gran variedad de artículos que te ayudarán a mejorar tu conocimiento financiero, incluyendo un artículo sobre métodos para realizar un presupuesto personal.