Un total de 634 menores víctimas de abuso sexual y 41 menores agresores sexuales han sido atendidos en Castilla-La Mancha en 2023, delito que viene aumentando según reflejan los informes de las fiscalías, y sobre los que el Gobierno regional actúa para prevenirlos y erradicarlos.
Así lo ha manifestado este miércoles la portavoz del Ejecutivo de Castilla-La Mancha, Esther Padilla, en una rueda de prensa para informar sobre los acuerdos de la reunión semanal del Consejo de Gobierno, uno de ellos la convocatoria de ayudas destinadas a entidades del tercer sector social para financiar programas y servicios de prevención y apoyo a la infancia y la adolescencia, por un montante global de 6,3 millones de euros para 2024.
Se calcula que estos programas llegarán a 70.000 niños y jóvenes, y 35.000 familias, en distintas áreas de intervención como la mediación familiar, el abuso sexual infantil, las conductas de riesgo, el acoso y ciberacoso, la violencia en el seno de la familia y los puntos de encuentro familiar.
Como ejemplos, la consejera ha citado los programas de prevención y actuación en situaciones de abuso sexual, tanto a víctimas como a agresores, así como a las familias, con el objetivo de prevenir y erradicar estos delitos que, según apuntan los expertos, se han acentuado en los últimos años por el fácil acceso de los menores a la pornografía en Internet.
También gracias a estas ayudas se desarrollan programas de mediación familiar; se favorece el llegar a acuerdos de divorcio extrajudicial que eviten enfrentamientos innecesarios; y se ofrecen puntos de encuentro para facilitar el régimen de visitas a los niños por parte de sus progenitores, con los que este año se ha ayudado a casi 1.000 menores a llevar de la mejor manera posible estas situaciones que a veces pueden ser conflictivas.
La convocatoria de ayudas a entidades sin fin de lucro también alcanza a los programas de prevención e intervención en violencia familiar y filoparental, a través de los cuales se presta apoyo e intervención, psicosocial y educativa a las familias en cuyo seno se producen estas situaciones de violencia, y que en el año 2023 han sido 930.
En esta área de infancia y adolescencia, la consejera portavoz ha destacado la aprobación el pasado mes de marzo de la ley de infancia y familia de Castilla-La Mancha que, ha dicho, contribuirá a evitar mucho dolor, a superar situaciones muy complicadas y a proteger a las generaciones futuras.
La convocatoria de ayudas, que también incluyen la realización de estudios de investigación sobre realidades emergentes, se publicará en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha la próxima semana y se podrán presentar los proyectos desde el día siguiente de su publicación.