El Ayuntamiento de Argamasilla de Alba, a través de la Concejalía de Servicios Sociales y Tercera Edad, homenajeó y reconoció una vida de esfuerzo y trabajo, con la entrega de una placa conmemorativa en el acto público celebrado el pasado sábado 6 de mayo en el Teatro Auditorio, a 23 socios y socias del Centro de Día de Mayores que han cumplido 85 años, y a Gumersindo Rodríguez Peña, que no pudo asistir al acto, por alcanzar los cien años.
El acto contó con la presencia y participación del alcalde, Pedro Ángel Jiménez, junto a la viceconsejera de Autonomía y Atención a la Dependencia, Ana Saavedra; la vicepresidenta de la Diputación de Ciudad Real, Noelia Serrano; la delegada provincial de Bienestar Social de la JCCM en Ciudad Real, Manuela González; la concejala de Servicios Sociales y Tercera Edad, Cristina Carretón; la portavoz del PP municipal, Sonia González, y la concejala de IU, Rosario Lara.
“Hoy estamos aquí para daros las gracias y reconocer todo lo que habéis hecho por nosotros en nuestro pueblo y por nuestra sociedad, y ello a pesar de los complicados momentos que os tocó vivir tanto social como laboralmente, pues el trabajo que se realizaba en vuestra época era muy duro”, indicaba el alcalde. Agricultores, maestros, albañiles, jornaleros o trabajadores de bodegas son algunos de los muchos y duros oficios que estuvieron representados en esta tarde de homenajes, pero también cocineras, cuidadoras, tenderas o amas de casa y, en general, muchas mujeres con doble jornada, que trabajaban fuera y dentro de casa.
El Centro de Día de Mayores, como se llama ahora, se inauguró el 9 de mayo de 1983 bajo el nombre de Hogar del Jubilado, cuarenta años después sigue siendo, principalmente, un centro de reunión de todos y todas las mayores de la localidad, afirmaba el alcalde.
En estos cuarenta años el centro ha cambiado mucho, adaptándose a las diferentes situaciones y a los nuevos tiempos. Uno de los motivos por los que ha cambiado, subrayaba el alcalde, es la incorporación de nuevos socios y socias cada vez más jóvenes, y, sobre todo, “porque son más activos y tienen ganas de hacer cosas y participar. Y puesto que el centro es solo un habitáculo, lo que importa son las personas, las actividades se han adaptado a ellas y a las nuevas necesidades y gustos”.
Asimismo, Jiménez subrayó que el centro se ha convertido en un espacio inclusivo con una importante presencia de las mujeres, prácticamente nula en sus inicios y minoritaria durante muchos años, las cuales hoy se han convertido en el motor del centro, siendo cada vez más activas y participativas.
La viceconsejera de Promoción de la Autonomía y Atención a la Dependencia, Ana Saavedra, afirmó que en España hay más de 20.000 personas con 100 años, una cifra que ha aumentado un 76% en los últimos diez años y se prevé que en el año 2050 sean más de 200.000 las personas que tengan cien años o más, “y puesto que vamos a vivir más años, estamos trabajando desde el Gobierno regional y municipal para que esos años sean de calidad”.
Saavedra destacó que las personas que se incorporan ahora a los centros de mayores son muy diferentes a las que lo hacían hace veinte años. Por eso, los centros de mayores deben adaptarse a las nuevas necesidades de los usuarios, para que puedan acoger a todos aquellos que quieran acercarse a ellos.
“Para el Gobierno de Castilla-La Mancha es un honor estar presente en este acto de homenaje y celebración del cuarenta aniversario del centro de mayores”, afirmó la viceconsejera, y continuó diciendo: «Todos los que hemos venido detrás tenemos una deuda histórica con todas las personas mayores que como vosotros fueron niños y niñas de la guerra, y que junto a otros muchos y muchas abrieron el periodo democrático que hoy disfrutamos».
En nombre del presidente regional Emiliano García-Page, y recordando la cita de Albert Einstein: «La vida es como montar en bicicleta: para conservar el equilibrio, debes mantenerte en movimiento»; Saavedra pidió a todos los mayores que sigan activos y nunca dejen de pedalear.
Por su parte, Cristina Carretón señaló que no se trata de organizar actividades solo para pasar el tiempo, sino que también tienen como objetivo la prevención, “sí, la prevención de la soledad y, por lo tanto, del deterioro físico y cognitivo; actividades que fomentan valores como la solidaridad, el compañerismo y la convivencia”.
La concejala destacó el servicio de atención psicosocial, donde se ofrece apoyo emocional y terapias a aquellas personas que lo necesitan, así como a sus familias, con las cuales se mantiene un estrecho contacto, siempre por y para el bienestar de los mayores. “Todo ello, con la ayuda directa del Consejo de Mayores, del cual cabe destacar su disposición para colaborar y su compromiso con el centro, haciendo de puente entre los usuarios y la dirección o la propia Concejalía de Bienestar Social. Son personas cuya labor cabe destacar, ya que también proponen nuevos talleres y actividades para sus compañeras y compañeros y siempre están preocupados por el buen funcionamiento del centro, por lo que merecen el agradecimiento y reconocimiento de todos”.
Este año, con motivo del 40 aniversario, además de las “muchas” actividades que organiza el centro a lo largo del año se ha elaborado un programa con 40 propuestas extraordinarias como un viaje al Senado, a la Diputación en su 125 aniversario, rutas de senderismo o encuentros con otros centros “que están resultando todo un éxito en cuanto a aceptación y participación”.
En la actualidad el centro cuenta con más de 300 personas que acuden semanalmente a las actividades. “Un centro remodelado recientemente, donde prima la funcionalidad para llegar a todas las socias y socios, que cada vez son más jóvenes y cuyas demandas evolucionan”.
La concejal también agradeció a todas las personas que trabajan en el Centro y colaboran para hacerlo posible, “su dedicación y esfuerzo son esenciales para que todo funcione correctamente”.
En definitiva, aseveró la concejala, el Centro de Día de Mayores es una parte fundamental de nuestra localidad, un espacio donde nuestros mayores pueden socializar, divertirse y recibir el apoyo emocional que necesitan. Por ello, mantenerlo, cuidarlo y mejorarlo es una muestra de respeto y gratitud hacia aquellos que han contribuido a construir la sociedad en la que vivimos hoy en día.
