El nuevo consejero de Educación, Cultura y Deportes del Gobierno de Castilla-La Mancha, Amador Pastor, ha mostrado su compromiso con los retos que se le ponen por delante, sobre todo poder sacar adelante las futuras leyes de Universidades, Formación Profesional y del Deporte.
Retos que ha asumido en declaraciones a los medios tras tomar posesión de su cargo, algo que ha hecho «muy ilusionado» después de una etapa en la que ya ha sido «delegado, director general y viceconsejero» en «diferentes papeles».
«Se abre un camino de trabajo futuro con estas leyes, que serán las líneas de trabajo, pero fundamentalmente quiero mantener el sello y la impronta de la atención a la comunidad educativa, al profesorado y a las familias, con diálogo con los interlocutores sociales y sindicatos», ha rematado.