El Partido Socialista de Castilla-La Mancha propondrá a sus candidatos en las investiduras de los ayuntamientos en los que ha sido la fuerza más votada en las pasadas elecciones municipales del 28 de mayo para garantizar gobiernos «moderados» donde no prime la «radicalidad».
Así lo ha manifestado el secretario de Organización del PSOE de Castilla-La Mancha, Sergio Gutiérrez, en una rueda de prensa ofrecida en Toledo, en la que ha discernido entre dos opciones de cara a las investiduras: o se permite un gobierno del PSOE o se constituyen gobiernos con un PP «muy débil» marcado por un Vox «fuerte».
Gutiérrez ha destacado que el PSOE ganó «claramente» los comicios locales, ya que fue el partido que obtuvo el mayor número de mayorías absolutas y de mayorías simples en la región, además de sumar 300 concejales más que el PP y 2.800 concejales más que Vox en Castilla-La Mancha.
A tenor de estos resultados, el número dos del PSOE castellano-manchego ha considerado que la «inmensa» mayoría de los ciudadanos, especialmente en las grandes ciudades, quieren «entendimiento» entre los dos principales partidos para que sus políticas no estén marcadas desde la «radicalidad» de Vox.
«O se permite un gobierno del PSOE o se constituyen gobiernos con un PP muy débil con un Vox fuerte», ha diferenciado, a lo que ha añadido que los votantes han pedido en las urnas la constitución de gobiernos marcados «por aquellos que han ganado las elecciones» y que garanticen un proyecto «centrado, moderado y de progreso».
Es por ello que Gutiérrez ha planteado al PP un acuerdo para permitir el gobierno «que mayoritariamente han votado los ciudadanos», especialmente en aquellos municipios en donde los populares han obtenido un resultado «débil», como, a su entender, es el caso de Toledo o Talavera de la Reina.
«Creemos que la inmensa mayoría de los ciudadanos de Castilla-La Mancha no quieren que el partido más débil y el más extremo sea el que marque la política en los próximos cuatro años», ha asegurado Gutiérrez, que ha resaltado que el PSOE ha sido la opción más votada por encima del 40 % en la mayoría de los municipios.
Por eso, ha avanzado que los socialistas se presentarán «como regla general» a las investiduras de aquellos ayuntamientos en los que han sido la fuerza más votada para que el PP tenga que optar «claramente» por permitir que gobierne quien ha ganado «clarísimamente» las elecciones o «anclar» a las ciudades a un alcalde del PP «débil» con concejales de Vox.
EL VOTO POR CORREO «CONSOLIDA» LA VICTORIA DEL PSOE
Asimismo, el secretario de Organización del PSOE regional ha valorado el recuento del voto por correo que «consolida» al candidato socialista Emiliano García-Page como «claro vencedor» de las elecciones autonómicas, que ha supuesto una diferencia «de 14 puntos», ha cifrado, respecto al PP en las cinco provincias.
Este resultado ha hecho aumentar el número de votos, 485.000, agrandando las distancias con el resto de partidos políticos en todas las provincias de Castilla-La Mancha, especialmente en la provincia de Ciudad Real, donde el PSOE ha superado el 47 % del voto escrutado, ha dicho.
Gutiérrez ha apostillado que estos son unos resultados «extraordinarios» de «cariño, confianza y apoyo» a García-Page como presidente electo de la comunidad autónoma por parte de los votantes, a quienes «no vamos a defraudar y vamos a devolver estos votos en forma de empleo e impulso del Estado de Bienestar y de estabilidad», ha prometido.
Según sus palabras, el electorado ha votado pensando en un determinado modelo de región y forma de hacer política y, con todo, ha pedido al presidente del PP regional, Paco Núñez, hacer una lectura «seria, humilde y real» de los resultados y «atenerse» a los mismos.
«Pedimos cuatro años de colaboración, pactos y estabilidad», ha concluido, a pesar de destacar que «no hay un PSOE más fuerte en España y ningún PP más débil».
