Tomelloso cuenta desde hoy con un nuevo punto de recogida de aceite vegetal usado, un “contenedor inteligente”, ubicado en el Pabellón San José, cuyo uso supondrá, a diferencia de otros sistemas de recogida, un beneficio para el usuario, que recibirá una compensación económica por depositar allí el producto. Así lo ha explicado la alcaldesa, Inmaculada Jiménez, que lo ha visitado junto con el presidente de la Mancomunidad de Servicios Comsermancha, Pedro Ángel Jiménez; el concejal representante del Ayuntamiento en la Mancomunidad, Amadeo Treviño y el gerente de la empresa que lo gestiona, José Antonio Alonso, para conocer sobre el terreno su funcionamiento.
Con el uso de este punto de recogida, además de obtener un beneficio económico, han incidido tanto la alcaldesa como el presidente de Comsermancha, el ciudadano contribuye a la obtención de importantes beneficios medioambientales, puesto que el aceite usado es muy contaminante y ocasiona grandes problemas en la depuración de aguas si se vierte a la red de alcantarillado. “Hay métodos de reciclaje, lo más fácil no puede ser tirarlo por el fregadero”, ha incidido Inmaculada Jiménez.
Este punto de recogida, similar a una máquina expendedora y que se suma al ya existente en el Punto Limpio (Polígono el Bombo), ha sido ubicado en el Pabellón San José, ha indicado la alcaldesa, por ser una zona “muy accesible y muy concurrida dada su cercanía con institutos, colegios, Conservatorio, instalaciones deportivas, zonas verdes y, los lunes, el mercadillo”. Lo que se pretende, ha afirmado lnmaculada Jiménez, es poner a disposición de los ciudadanos “una manera fácil y accesible de reciclar el aceite vegetal, con el que esperamos evitar los problemas de anteriores sistemas que fueron fruto de vandalismo y deterioros por mal uso”.
“Queremos que Tomelloso sea una ciudad respetuosa con el medio ambiente, que apueste por un desarrollo sostenible y que entre todos tratemos de cuidar un poquito más nuestra localidad y planeta en el que vivimos para dejar un buen futuro a las generaciones venideras”.
Por eso, se va a estudiar la instalación de otros contenedores de este tipo para el reciclaje de otro tipo de residuos. Esta es “una sociedad de consumo que cada vez genera más basura y hay que depositarla en los lugares habilitados para ello con el fin de que sea reciclada como debe ser para darle una vida útil mucho mejor”.
El presidente de Comsermancha ha avanzado que tras la instalación de este “contenedor inteligente” de recogida de aceite vegetal usado en los dos municipios más grandes de su ámbito de actuación, entre ellos Tomelloso, se instalarán otros de este tipo u otro sistema en todos los municipios de la Mancomunidad, siempre en lugares contralados o vigilados “para evitar vandalismo” como ha ocurrido hasta ahora en algunos municipios.
Cómo funciona
Para poder utilizar este “contenedor inteligente”, es necesario darse de alta en la APP “Reciclaygana”, donde el usuario podrá comprobar cómo se van incrementando las recompensas, a medida que va reciclando. Una vez dado de alta en la APP el ciudadano obtiene un código QR que deberá utilizar cada vez que deposite aceite para reciclar en este “contenedor inteligente”. Cuando la máquina lee el código, emite una etiqueta que el usuario pega en la botella y que le identificará para que, una vez hechas las comprobaciones por parte de la empresa que lo gestiona, de que el producto depositado es realmente aceite vegetal usado, le pueda ingresar el dinero (3 euros por cada 5 kg) en la cuenta facilitada cuando se dio de alta en la APP.
La plataforma “reciclaygana” es, han explicado los responsables de Comsermancha y la empresa que la gestiona, “una gran red donde todos los usuarios se benefician de un importante porcentaje de los beneficios de la venta de sus productos usados. Cuantos más usuarios haya mayor será el porcentaje de beneficios que se pueda repartir entre los usuarios y mayores también los beneficios medioambientales. Así, señala la empresa, por cada litro de aceite vegetal que se recicla se evita la contaminación de mil litros de agua, el gasto de cinco litros de agua caliente o fría para arrojarlos por el desagüe y su utilización como biodiesel evita la emisión de 1,32 kg de CO2 a la atmósfera.
