Durante los últimos meses, diversas zonas de España han registrado casos sospechosos o confirmados de sumisión química por pinchazos a mujeres, mayoritariamente en locales de ocio nocturno. Castilla-La Mancha no se queda atrás, y también ha formado parte de los registros, aunque esta misma semana la Fiscalía Superior invitaba a la calma asegurando que muchos de estos casos se deben a “actuaciones de bromistas”.
De hecho, según afirman desde el Hospital de Tomelloso y desde el Ayuntamiento, el municipio no tiene constancia de ninguna denuncia o caso confirmado por sumisión química. Sin embargo, a pesar de que las cifras no son alarmantes, nunca está de más recordar cuál es el protocolo que debe seguir una persona en caso de notar un pinchazo en un local de ocio o en cualquier otro lugar del municipio.
Tomelloso sigue el mismo protocolo de actuación que el resto de lugares de Castilla-La Mancha, un plan que implica la coordinación de policía local, guardia civil, protección civil, el centro de la Mujer y, por supuesto, el equipo sanitario del Hospital. Durante la Feria, además, se instaló un punto violeta para atender posibles casos. “Por suerte, no hubo que atender ningún caso de agresión ni de ningún tipo”, ha confirmado el concejal de Seguridad del Ayuntamiento de Tomelloso, Francisco José Barato.
Entonces, ¿qué debo hacer si noto un pinchazo? El primer paso del protocolo recomienda ser consciente de las sensaciones del propio cuerpo, y prestar especial atención a síntomas como la soñolencia, náuseas, visión borrosa, pérdida de recuerdos, falta de audición o sensación de estar desubicada.
En caso de notar algo extraño, es preciso ponerlo en conocimiento, avisar a nuestro entorno y no quedarse sola. En algunos casos, es habitual llegar a sentir vergüenza, pero debemos dejarla a un lado para actuar con rapidez.
Una vez avisado, es el momento de alertar a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad, quienes se encargarán de evaluar la situación de la persona afectada. La propia policía servirá de acompañamiento a la víctima en caso de haber contactado con ellos de manera presencial, y en caso de aviso telefónico, se recomienda no quedarse sola hasta la llegada de las autoridades.
Cuando la policía llegue al lugar, recabará la información y analizará los hechos. Se debe avisar al servicios de emergencias, en caso de que aún no lo haya hecho la persona afectada o sus acompañantes, o puede ser incluso la propia policía quien la lleve hasta el hospital. Mientras tanto, otros policías se encargarán de las tares de investigación: evaluar el entorno, valorar posibles sospechosos, tomar declaración de posibles testigos, identificar el contenido de las cámaras de vigilancia, etc.
La persona afectada debe acudir al Hospital de Tomelloso, desde donde se seguirá el protocolo establecido para pacientes con sospecha de sumisión química. Cabe mencionar que los equipos de Atención Primaria y PAC también atienden este tipo de urgencias y derivan lo antes posible a la persona afectada al hospital más cercano. Una vez allí, los servicios sanitarios cumplimentarán el Parte de Lesiones y anotarán si la mujer ha sufrido una agresión. Además, es posible que se le pidan datos de contacto para avisar a familiares o personas cercanas.
Es el propio personal sanitario del Hospital de Tomelloso quien se encargará de la extracción de muestras a la víctima para determinar si contienen sustancias tóxicas. En caso de que los resultados de la prueba den valores positivos, el servicio de Urgencias deberá comunicarlo al SESCAM, y el parte médico servirá como prueba ante la policía para tramitar la denuncia de la víctima.
De momento, las cifras en Castilla-La Mancha y en Tomelloso no llegan a índices preocupantes, pero es importante seguir estos pasos y ponernos en manos de todo un equipo de profesionales coordinados para cuidar de los vecinos y vecinas del municipio. En todo caso, y ante cualquier sospecha de posible pinchazo, “más vale prevenir que curar”.