Chema Perona nació y creció en Tomelloso, donde estudió diseño gráfico en la Escuela de Artes “Antonio López”, y desde hace unos 22 años vive y trabaja en Madrid, dónde ha ido forjando su lenguaje plástico a través de la técnica del collage, con unos impresionantes resultados, que le están poniendo en primera linea del ambiente artístico de la capital.
Apasionado de la cultura Pop desde muy joven, creció influenciado por el Pop Art y artistas como Richard Hamilton, Chema Perona se sumerge en la estética del diseño gráfico y la publicidad de la cultura de masas, pero más allá de esa estética su discurso es una sutil crítica a la sociedad actual que ha heredado unos prejuicios ancestrales de la sociedad más tradicional.
Domina perfectamente la estética moderna del diseño gráfico, y sus collages aportan una interesante tercera dimensión, que en muchos casos convierten a la obra en un relieve o una instalación, y está en un momento dulce a nivel productivo y creativo, ya que en estos últimos años ha expuesto en espacios emblemáticos de Madrid como la Galería de Arte Arriaza, Factoría de Arte, Espacio Jorge Juan o Cajasur Art Lab.
La exposición se titula “Fuera de contexto”, y efectivamente el artista juega con objetos sacados de su contexto, como la foto de un tractor haciendo surcos sobre unos recortes de cartón ondulado que simulan unos campos arados. Chema suele trabajar con imágenes de revistas internacionales, como por ejemplo París Match, las cuales recorta y sitúa en otros contextos. Una cosa que le interesa mucho a este artista es el juego estético de imágenes de distintas épocas, y ese juego de “fuera de contexto” hace que su obra sea muy narrativa, lo que unido a una estética muy cuidada da un valor añadido a sus piezas.
Me cuenta que tiene varios proyectos. El primero es empezar a trabajar en su flamante taller de co-working space en pleno centro de Madrid, y para dentro de unos meses se va a México, junto a un compañero, a trabajar en un proyecto de la Universidad de Guadalajara, algo que le ilusiona mucho.
La exposición estará en Beat Wines (calle Galileo-6) hasta el próximo 8 de enero, y este interesante local tiene más proyectos en marcha, proyectos que irán surgiendo y que en muchos casos no van a publicitar, sino que prefieren ir dando sorpresas con eventos concretos y espontáneos. Un lugar diferente para proyectos diferentes, en el que se unen la pasión por el vino, la buena música, y el arte en general.
