Los atragantamientos son una de las principales causas por las que los pacientes acuden a los servicios de Urgencias durante la Nochevieja, junto con las intoxicaciones alimentarias y también etílicas, así como las reacciones alérgicas. Los especialistas de Vithas recuerdan que conocer las técnicas ante una obstrucción de la vía aérea por cuerpo extraño, como la maniobra de Heimlich, reduce el riesgo de sufrir una parada cardiorrespiratoria.
«Según datos del INE, la asfixia por atragantamiento supone la tercera causa de muerte no natural en nuestro país. Si tenemos en cuenta que en estas fechas aumentan las celebraciones en las que compartimos mesa, mientras comemos, bebemos y hablamos, el riesgo de sufrir un atragantamiento con espinas de pescado, piezas grandes de carne, la ingesta de uvas, así como los tradicionales brindis con objetos dentro de las copas o ciertos dulces navideños, es mayor», ha alertado el doctor Alberto Martel, especialista del servicio de Urgencias del Hospital Vithas Las Palmas.
Esto puede pasarle cualquier persona, indistintamente de la edad. Sin embargo, el riesgo de asfixia por atragantamiento durante la niñez incrementa, en concreto entre uno y cinco años. De acuerdo con el doctor Fernando Baixauli, pediatra del Hospital Vithas Valencia 9 de Octubre, esto se debe a que «los niños pequeños no tienen todos los dientes para masticar adecuadamente, el reflejo de deglución debe aún desarrollarse más y no son conscientes a esas edades del peligro que ello conlleva».
Asimismo, el especialista en Pediatría recuerda que «se debe prestar especial atención, sobre todo en esta época de regalos, a las piezas pequeñas de juguetes y a los globos, y tener en cuenta que, a menor calibre, mayor peligro pues, si los aspiran, al ser goma, se adapta a la vía aérea y es muy complicado sacarlos».
En esta misma línea, la doctora Soledad Rodríguez, pediatra del Hospital Universitario Vithas Madrid Arturo Soria, explica que hay algunos alimentos que no debemos dar a nuestros hijos hasta que no cumplan los cuatro o cinco años.
«Los frutos secos no deberíamos dárselos ni en trozos ni enteros. Algo similar sucede con los caramelos duros o los turrones y a las uvas debemos quitarles las pepitas y partirlas en pequeños trozos», señala la doctora Rodríguez, quien apunta que siempre deben estar vigilados y evitar que corran o jueguen mientras comen.
Para saber si un amigo o familiar sufre un episodio de asfixia por atragantamiento, el doctor Alberto Martell explica que «se sospecha de un atragantamiento si alguien es repentinamente incapaz de hablar, especialmente, si estaba comiendo. Además, es un signo universal que la persona que sufre un atragantamiento se lleve las manos al cuello», añade.
Según el especialista del Hospital Vithas Las Palmas, ante una obstrucción de la vía aérea por un cuerpo extraño, es importante realizar las siguientes maniobras.
«Lo primero es animar a toser a la persona accidentada y, en el caso de que la tos no le ayude a expulsar el objeto, darle hasta cinco golpes en la espalda, inclinarlo para tal propósito o, en última instancia, golpear con el talón de la mano entre los omóplatos. En el caso de que estas técnicas no funcionen, se puede aplicar una serie de cinco comprensiones abdominales para realizar la conocida como maniobra de Heimlich», ha detallado.
TRES PASOS PARA REALIZAR LA MANIOBRA DE HEIMLICH
De acuerdo con la Guía del European Resuscitation Council, los pasos a seguir para ayudar a una persona y extraer un cuerpo extraño que obstruya las vías aéreas mediante la maniobra de Heimlich son: lo primero es colocarse detrás de la víctima y, con ambos brazos, rodear la parte superior del abdomen de la persona accidentada. En segundo lugar, inclinarlo hacia adelante y apretar con el puño, situado entre el ombligo y la caja torácica. Mientras tanto, agarrar el puño con la otra mano y tirar bruscamente hacia dentro y hacia arriba hasta cinco veces.
«Si el atragantado no se ha aliviado después de cinco compresiones abdominales, lo recomendable es combinar la manobra de Heimlich con el resto de las técnicas: cinco golpes en la espalda con cinco compresiones abdominales hasta que se resuelva la obstrucción», señala el doctor Alberto Martell, quien recuerda que «en el caso de que el atragantado se quede inconsciente lo mejor es llamar al número de Emergencias y seguir sus instrucciones».
En el caso de que la persona accidentada sea un niño, «la maniobra se realiza poniéndose de rodillas detrás de este, rodeándolo con los brazos alrededor de la cintura y formando un puño con una mano. Después, se coloca el puño con el lado del pulgar contra el vientre, justo arriba del ombligo, pero muy por debajo del esternón. Se realiza una compresión rápida hacia arriba en el abdomen.
«Es posible que se necesite utilizar más fuerza para una persona más grande y menos para un niño o para un adulto de baja estatura», tal y como indica Baixauli.