El presidente regional, Emiliano García-Page, ha vuelto a defender su idea de que el confinamiento por el contagio de coronavirus sea de entre tres y cinco días tras la llegada de la variante ómicron, aunque ha reconocido que más importante que la opinión de cualquier comunidad autónoma es «lo que pactemos entre todos».
García-Page, a preguntas de los medios tras la inauguración este viernes de la Ciudad de la Justicia de Albacete, ha argumentado este confinamiento de entre tres y cinco días en que «nos lo dicen los informes técnicos y nos lo está revelando la experiencia», aunque ha insistido en que esta es «una opinón» suya.
Además, el presidente castellanomanchego ha señalado que esta reducción del confinamiento posibilitaría «sortear el enorme problema que se produce de inseguridad laboral, de multitud de bajas y de inestabilidad en el ámbito económico».
«Está todo el mundo vacunado, las pruebas diagnósticas están circulando con facilidad y lo que hay que entender es que, con mucha prudencia y seguridad, vamos a seguir las recomendaciones de los técnicos. Yo opiné y vuelvo a decir que es razonable reflexionar sobre la posibilidad de entre tres y cinco días y, si no afecta al sistema sanitario y hay consenso, lo vamos a seguir defendiendo», ha apuntado.
«Pero -ha continuado- más importante es lo que pactemos entre todos. Si entre todos se pacta una fecha, esa es la que hay que respetar y es lo que estamos haciendo», ha concluido.