El Gobierno de Castilla-La Mancha va a destinar, el próximo curso 2022-2023, un total de 1.450.000 euros a la adquisición de material tecnológico para «dar un nuevo impulso» a la Formación Profesional con la implantación de 49 nuevos ciclos y siete nuevos cursos de especialización de estas enseñanzas.
Según ha señalado la consejera de Educación, Cultura y Deportes, Rosa Ana Rodríguez, esta inversión está destinada a la compra de material y equipamiento para el desarrollo curricular de las nuevas enseñanzas de Formación Profesional que se imparten por primera vez en el próximo curso y para la actualización de algunas ya existentes, de la que se van a beneficiar 2.500 alumnos de 70 centros educativos de nuestra comunidad autónoma.
Rodríguez ha destacado que, con el objetivo de adaptar estas enseñanzas al tejido productivo y a las necesidades que demanda el actual mercado laboral, se dotará a estos centros de material tecnológico para que los alumnos «puedan hacer prácticas vinculadas a los diferentes sectores en los que después tendrán que desarrollar su competencia profesional como son la digitalización y la ciberseguridad; la informática y las comunicaciones; la fabricación automática, la sanidad y los servicios asistenciales; el medioambiente; el mantenimiento industrial o el comercio, entre otros».
En nota de prensa, desde el Ejecutivo regional han destacado que la Formación Profesional ha experimentado un crecimiento muy importante en Castilla-La Mancha en los últimos años y prueba de ello es que, desde el año 2015, el número de ciclos formativos que se ofertan ha aumentado en un 26 por ciento, pasando de 777 ciclos formativos a los 979 que se ofertan para el próximo curso.
Con respecto al alumnado, ha pasado de unos 30.000 estudiantes, que había en FP en el curso 2015-2016, a unos 42.000 que se prevén para el próximo curso, lo que supone 12.000 alumnos y alumnas más.