Con el invierno despidiéndose con unos días primaverales, y la primavera a punto de llegar, que recibiremos con tiempo más propio de invierno, el embalse de Peñarroya ha llegado al 100% de su capacidad y ha comenzado a rebosar agua por la parte superior de la presa.
Y todo esto a pesar de que se encuentra abierto el aliviadero, y que también se esta desaguando a través del canal de riego que abastece a la comunidad de regantes del «Estrecho de Peñarroya».