Cáritas Tomelloso aumentó en un 85% las ayudas directas en 2020 en comparación con el año anterior. Así lo ha indicado el delegado de Cáritas, Antonio López, al realizar un balance de las actuaciones de la entidad durane el año 2020. De esta forma, López ha expuesto que se ha pasado de conceder 88.000€ en ayudas directas a 157.000€.
Todo ello, en un año donde la pandemia ha intensificado la necesidad de pedir ayudas o soporte a entidades como Cáritas, quienes han ido aportando sus contribuciones a estas personas tras recaudar dinero en las recolectas y las donaciones, con especial hincapié en el gesto solidario de la diócesis de Gerardo, con 43.000€ aportados.
Además, si bien en años anteriores se destinaba una partida económica a la hablitación de espacios con condiciones dignas en la entidad, el pasado 2020 no se consideró como prioritario debido a la necesidad de atender a las personas afectadas por la crisis sanitaria. De hecho, la situación de los ERTES y la falta de empleo y estabilidad provocó que un total de 204 personas acudieran a pedir ayuda a Cáritas por primera vez.
Con respecto a los talleres de la entidad, se llevaron a cabo el taller textil (con 19 personas), el taller educativo (11 participantes), el de Hospital de juguetes (4), el taller de la ESO (7 personas, de las cuales 5 lograron el título), empleado doméstico (8), alfabetización (20), taller de jóvenes (12), un proyecto de charlas educativas (8), y los talleres de orientación laboral (89).
Según ha explicado la directora de Cáritas Tomelloso, Teresa Requena, otro de los colectivos que han necesitado especial atención por la situación de la pandemia han sido las mujeres en contexto de prostitución. Se trata de un colectivo que no cuenta con recursos y con cargas familiares en sus países.
La entidad también ha tenido que hacer frente a la situación de otros colectivos en riesgo de exclusión, como las personas sin hogar (sumando 18 personas en el balance), o la acogida de familias (unas 570), así como el colectivo de migrantes que van llegando progresivamente.
PERSPECTIVAS DE FUTURO
Con respecto a este nuevo año 2021, la entidad describe la situación como «difícil», puesto que prevén un aumento en el número de personas a las que atender. Sin duda, la vivienda es una de las problemáticas a la que más se van a enfrentar.
Según han explicado desde la entidad, el año 2021 traerá tres retos principales. En primer lugar, el fortalecimiento de la acogida, especialmente ante la llegada de tantas personas y familias que acuden pidiendo ayuda.
En segundo lugar, el soporte a las personas migrantes, ya que afirman que ha aumentado la población que solicita la protección internacional y que se encuentran en situación irregular. Un ejemplo de ello son los temporeros que han llegado a Tomelloso: de los 305 totales del 2020, 175 se encontraba en situación irregular y, por tanto, sin derecho a trabajar.
En tercer lugar, la entidad se enfrentará al reto de las mujeres en contexto de prostitución y los migrantes sin documentación, a los que hay que ayudar a la hora de realizar procesos administrativos, como el empadronamiento o la obtención de la tarjeta sanitaria, o en la creación de una cuenta bancaria.
«Estamos desbordados, pero atendemos a todos los que pasan por Cáritas», ha afirmado Requena, con el agravante añadido de que muchos voluntarios no están prestando su tiempo porque son personas mayores y desde la entidad no quieren arriesgarse a que se contagien. Sin embargo, la entidad mira hacia adelante siguiendo el método que siguen hasta ahora, y es solventar los problemas en el día a día.