Los vecinos del barrio San Juan de Tomelloso están hartos. La okupación ilegal que llevan viviendo desde hace años en la zona se ha convertido en una demanda histórica. Por ello, desde la Asociación de Vecinos han convocado una concentración ciudadana por la defensa de la propiedad privada el próximo jueves, 16 de septiembre, a las 21:00 horas en la Plaza de España.
Bajo los lemas «Si no actúas, no te quejes luego», o «¡Juntos por soluciones a la realidad okupa ya!», se unen así a la campaña nacional promovida por la Plataforma de Afectados por la Ocupación. En ella, se pide una Ley antiocupas que permita ejercer los derechos del propietario en caso de ocupación ilegal, además de no demorarse hasta 4 años en recuperar una vivienda privada.
De hecho, desde la Directiva de la Asociación ya preparan un autobús para viajar hasta Madrid el sábado, 18 de septiembre, fecha en la que se pedirá esta Ley Antiocupas a nivel nacional.
“Es una lamentable situación la que vive España en muchos aspectos, pero más lo es cuando el pasotismo y la pasividad se adueña de los ciudadanos para no exigir que sus derechos sean defendidos, ya no solo por tema legal, sino moral y ético”, ha señalado el presidente del Barrio San Juan, J. Benavente.
Desde el barrio tomellosero, las peticiones son claras: mejorar la seguridad y la protección de los ciudadanos, que Tomelloso y su barrio «no sean ningún albergue», que haya una completa y adecuada ordenanza municipal, y poner fin a los problemas sociales y perjuicios derivados de la usurpación/ocupación ilegal de viviendas.
La Asociación reivindica que sigue habiendo casos de okupaciones ilegales de viviendas privadas y de entidades bancarias, así como el fenómeno de la inquiocupación (inquilinos en pisos de alquiler que no pagan y a quienes no puedes echar). Al respecto, afirman que «hasta que no nos pasa muy de cerca, lo vemos como un problema lejano».
Por ello, animan a todos los vecinos de Tomelloso a que lean y firmen el manifiesto, para que la propiedad privada «sea defendida sin tener que obligarnos a tomar la justicia por nuestras manos».