El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha confiado en que a la vuelta de diez días «probablemente» se den las condiciones en materia sanitaria de levantar el cierre perimetral de la región, para poder «afrontar la primavera y la Semana Santa». «Nos importaría hacerlo con mucha prudencia».
En rueda de prensa desde Ciudad Real, el presidente autonómico ha señalado que en la reunión de este sábado, en la que el Consejo de Gobierno podría aprobar que la región pase a nivel 2 si los datos lo permiten, los límites perimetrales se quedarían prácticamente similares.
Asimismo, a preguntas de los medios, ha señalado que este sábado se podrían empezar a modular el acceso de «forma permeable» en las residencias de mayores, teniendo en cuenta las que están libres del virus y las que cuentan con casos.
La intención del Ejecutivo es levantar el perímetro de la región con la «inteligencia del verano», para que esta apertura sea una «bombona de oxígeno» y se pueda acompasar la mejora de los datos con la recuperación económica.
Ha remarcado García-Page que esta apertura se tendría que realizar con un «sentido quijotesco», en el que prime la prudencia, sin quedarse cortos pero sin sobrepasarse. No obstante, en este escenario de movilidad, García-Page ha mostrado su preocupación por la cepa británica que tiene «un ritmo más acelerado».
Preguntado por código QR ‘Ocio Responsable’, el presidente regional ha dejado claro que seguirá teniendo un planteamiento voluntario y se trabajará con el sector la posibilidad de que tenga una dinámica más exigente.
Asimismo, ha indicado que cadenas comerciales han mostrado interés por esta herramienta, así como el Gobierno de España y se van a celebrar reuniones con comunidades autónomas que se lo están empezando a plantear.