El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha planteado la próxima reunión de ocho presidentes autonómicos del próximo 23 de noviembre como una reivindicación de las comunidades autónomas contra el «ombliguismo» que a su juicio existe desde la M-30 hacia Madrid en el Gobierno estatal.
Durante su intervención en un acto empresarial, García-Page ha señalado que ahora el objetivo es que la información regional «penetre en Madrid», para lo cual la cita del 23 de noviembre será «muy importante».
«Que no tenga que salir un diputado por Teruel para decir que hay provincias que van a desaparecer», ha lamentado García-Page.