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lunes, 23 diciembre
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El Gobierno regional resalta el gran esfuerzo colectivo realizado en un año duro

La portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha, Blanca Fernández, ha resaltado que 2021 “ha sido un año muy duro, de esfuerzo compartido” que, sin embargo, ha garantizado y consolidado una educación segura en las aulas y el bienestar de personas mayores y colectivos más vulnerables, además de lograr importantes avances en materia de igualdad.

Todo ello ha permitido alcanzar logros que responden a “un mérito compartido, cuyo protagonista ha sido el esfuerzo compartido con agentes sociales, entidades del tercer sector social, otras instituciones, personal funcionario, etcétera, que hacen que consigamos tener una mejor situación económica y mejorar los servicios públicas de Castilla-La Mancha”.

Blanca Fernández ha destacado también la apuesta política de fondo del Gobierno regional, que tendrá su continuidad en el año que está a punto de comenzar, dado que el presupuesto elaborado por el Ejecutivo regional dedicará 6.758 millones de euros a reforzar los servicios públicos fundamentales, es decir, la sanidad, la educación y los servicios sociales. Unos recursos que suponen en torno al 70 por ciento del gasto total de carácter no financiero y consolidan la inversión extraordinaria realizada en este ámbito.

En el plano educativo, y en nombre del presidente Emiliano García-Page, Blanca Fernández ha dado las gracias a toda la comunidad educativa por afrontar un nuevo curso escolar “entregada con profesionalidad a educar a nuestros hijos e hijas”, a pesar las circunstancias excepcionales del curso pasado y de éste.

Para este fin, la consejera y portavoz ha indicado que el Gobierno regional tuvo claro desde el principio que debía continuar con el refuerzo de la contratación de 3.000 docentes del año Covid “que ha permitido, además de mejorar la calidad de la enseñanza, realizar los desdobles necesarios para el cumplimiento de las medidas higiénico sanitarias”.

Blanca Fernández ha recordado la apertura de tres escuelas rurales en el presente curso escolar que se unen a otros tres colegios nuevos y a seis comedores escolares. Un servicio este último del que se benefician 25.413 niños y niñas de toda la región tras aumentar un 20 por ciento las becas para tal fin. También ha hecho mención a las 72.631 ayudas en el caso de libros de texto, sin olvidar la paulatina reducción de ratios desde que Emiliano García-Page asumió en 2015 la Presidencia de Castilla-La Mancha, y que ha supuesto pasar de 28 a 25 alumnos y alumnas en Infantil, con el compromiso de bajar hasta los 22 en Educación Infantil de 3 años en el próximo curso escolar; de los 30 a también 25 en Primaria; de 35 a 30 en Secundaria y de 40 a 30 en Bachillerato, esta última medida adoptada en el presente curso académico.

Precisamente, la apuesta por la calidad de la enseñanza se refleja en el Plan de Éxito Educativo cuantificado en 14 millones de euros ideado para atender al alumnado vulnerable, tanto en la parte educativa como social. Una medida de inclusión y equidad que supone la contratación de mil docentes extra y que permite llegar a más de 100.000 alumnos y alumnas; el Plan de Digitalización dotado con una inversión de 71 millones de euros para distribuir 79.500 nuevos dispositivos informáticos y formar al profesorado, pero también mediante programas de innovación, la estabilización de plantillas con la convocatoria de 1.207 plazas en el presente ejercicio o la reducción de la tasa de interinidad con el objetivo de situarla por debajo del seis por ciento en 2022.

En cuanto al capítulo de infraestructuras de mediana o de gran envergadura, la portavoz ha concretado que “de las 1.137 actuaciones que tenemos planificadas, y que cuentan con una inversión de 92,3 millones de euros, hemos terminado o están a punto de finalizar 966 obras y 171 comenzarán su ejecución el próximo año”, a las que hay que sumar otras 700 obras menores acometidas con motivo de adaptaciones COVID o como consecuencia de la borrasca Filomena o de las DANAS del pasado verano.

En cuanto a enseñanzas superiores, la consejera de Igualdad y portavoz ha ensalzado la sintonía del Gobierno de García-Page con la Universidad de Castilla-La Mancha y la Universidad de Alcalá de Henares, un contexto en el que se enmarcan las transferencias de 193 millones de euros a los contratos-programas de ambas universidades en 2021, un 15 por ciento más que en el año anterior, y la reciente firma de dos convenios con la Universidad de Castilla-La Mancha por una cuantía que supera los 127 millones de euros para impulsar y financiar infraestructuras y actuaciones de investigación en los campus universitarios que dan certeza y futuro a esta institución académica.

Justicia y sensibilidad con las políticas de Bienestar Social

Para Blanca Fernández, las políticas de Bienestar Social son otro vivo ejemplo para ilustrar el grado de compromiso, equidad, justicia y sensibilidad de un Gobierno, y aquí cabe decir que el Ejecutivo castellanomanchego liderado por Emiliano García-Page “atiende a 63.138 personas en el Sistema de la Dependencia, en el que ocupa el segundo lugar del ranking nacional tras alcanzar la mejor cifra de la historia, posee lista cero en el servicio de Teleasistencia y ha superado los cinco millones de horas en ayudas a domicilio”.

Además, cabe indicar que el Gobierno regional destina 125 millones a las personas con discapacidad, colectivo que, por cierto, en Castilla-La Mancha cuenta con la mayor tasa de actividad del país; ha contribuido a que 3.150 familias no sufran pobreza energética o “somos la segunda Comunidad Autónoma con más plazas residenciales para personas mayores y la primera en cuanto al número de viviendas de mayores”, ha puntualizado Blanca Fernández.

La igualdad como punto de partida

Por último, en referencia a su cartera, la consejera ha destacado que Castilla-La Mancha es la Comunidad Autónoma de España que más invierte por habitante para avanzar en igualdad entre hombres y mujeres. Para ello, si este año se ha gestionado el mayor presupuesto en Igualdad “lo vamos a superar el año que viene con 46 millones de euros”, ha dicho Fernández, el presupuesto más elevado de la historia que multiplica por tres al de 2015.

Una parte importante de esa cantidad, más de 20 millones de euros se destinan a la lucha contra la violencia machista y a la protección y la ayuda de las mujeres víctimas de violencia de género y sus hijas e hijos; 16 millones de euros se destinan a la conciliación y a la corresponsabilidad a través del Plan Corresponsables, “y hemos aumentado las plazas para mujeres y menores en los recursos de acogida de la región, actualmente contamos con 94 plazas para mujeres y 200 plazas para menores”, ha explicado.

Además, la consejera se ha mostrado particularmente orgullosa de haber conseguido convertir las ayudas al alquiler para mujeres víctimas de violencia de género –que pasan de un máximo de 350 a 750 euros mensuales- y las ayudas de orfandad como “ayudas-derecho, ayudas blindadas porque alcanzamos el cien por cien de quienes las solicitan”.

Blanca Fernández ha cerrado este apartado con un compromiso de legislatura: la Ley de Diversidad Sexual y Derechos LGTBI, cuyo anteproyecto ya pasó hace poco más de una semana por el Consejo de Gobierno y que la consejera de Igualdad y portavoz prevé que se apruebe en las Cortes de Castilla-La Mancha en el próximo periodo de sesiones que va de enero a junio, “a ser posible por unanimidad porque es una deuda histórica con el colectivo LGTBI”.

Y ha añadido que “entiendo que tenemos que hacer un esfuerzo compartido y conjunto entre todos los grupos políticos; ya lo hemos hecho con las entidades sociales, los colectivos colegios profesionales y ahora toca que los grupos parlamentarios”, para poder asegurar que se trata de una norma “del conjunto y no solo una ley del gobierno”.

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