El secretario de Estado de Medio Ambiente del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, Hugo Morán, ha defendido que reducir el volumen de agua a transferir en el trasvase Tajo-Segura obedece a una decisión técnica y que beneficiará a ambas cuencas.
En un vídeo remitido por el MITECO, Morán explica que la modificación de las reglas de explotación de la situación 2 del trasvase Tajo-Segura, por la que se reducirá el máximo mensual trasvasable de los 38 hectómetros cúbicos (hm3) actuales a 27 hm3, beneficiarán tanto a la cuenca cedente como a la receptora y que obedece «estrictamente» a una recomendación técnica.
En la actualidad, el nivel 2 establece que cuando las existencias conjuntas de los embalses de Entrepeñas y Buendía están por debajo de 1.300 hm3, pero por encima del nivel 3 (desde 586 a 688 hm3 según los meses) se autoriza de manera automática una transferencia mensual de 38 hectómetros cúbicos.
Morán ha explicado que el Gobierno aboga por dar una respuesta «más razonable» a las necesidades de ambas cuencas, en línea con las recomendaciones técnicas.
Así, ha recordado que la última modificación realizada en estas normas se produjo en 2013 y ha asegurado que en aquel momento «se hizo desoyendo las recomendaciones técnicas» que indicaban que en situación de nivel 2 -en la actualidad se transfiere de forma automática 38 hectómetros cúbicos- no debería rebasarse los 30 hectómetros cúbicos.
«De hacerlo se podía colocar al sistema en una situación excepcional, buena parte del tiempo a lo largo del año hidrológico y eso ha redundado primero, en reducir las reservas disponibles en cabecera y, en segundo lugar, no permitir actuar con una predictibilidad suficiente», ha criticado el secretario de Estado.
A su juicio, aquella fue una decisión política del Gobierno del PP que «se ha demostrado errónea, equivocada», ya que «aproximadamente» la mitad del tiempo el sistema está esa situación.
En estos momentos, según ha apuntado hay aproximadamente un 20 por ciento de posibilidades de que el sistema llegue a nivel 4, que es cuando no se puede realizar ningún trasvase. Morán recuerda que hubo una época con once meses consecutivos en los que el sistema estuvo en esa situación y, por tanto, el trasvase fue de cero hectómetros cúbicos.
Por eso, justifica que no se puede permitir que vuelva a producirse esa situación, para lo que el Gobierno ha adoptado la decisión «atendiendo al criterio técnico» y con los parámetros ya disponibles en 2013, para procurar no entrar en niveles excepcionales de situación 3 o situación 4.
Por tanto, afirma que es «necesario» establecer en el nivel 2 un volumen trasvasable que «no sobrepase» los 27 hm3, porque eso permitirá contar con más volumen de agua en los embalses de cabecera, que no sufrirán se podrá garantizar el suministro de agua para beber y también a los usos económicos que se derivan del aprovechamiento del trasvase.
En definitiva, Morán concluye que modificar la regla del trasvase en situación de nivel 2 obedece a una recomendación técnica para dar una «necesidad más razonable tanto de la cuenca cedente como en la receptora».