El Gobierno de Castilla-La Mancha, después de que las compañías eléctricas en pleno hayan amenazado con parar las centrales nucleares y subir el precio de la luz tras las medidas adoptadas por el Ejecutivo central, ha lamentado el tono de «amenaza» y confía en que no pongan en peligro de forma anticipada el cierre regulado de las nucleares hace años.
Así lo ha indicado el consejero de Desarrollo Sostenible, José Luis Escudero, que, preguntado por esta cuestión durante la rueda de prensa que ha ofrecido para dar cuenta de los acuerdos aprobados por el Consejo de Gobierno, ha dicho respetar el comunicado de las eléctricas pero no compartirlo, pues las medidas adoptadas por el Ejecutivo de Pedro Sánchez tratan además aminorar de forma temporal el exceso de retribución de eléctricas.
«Honestamente, ni las administraciones ni las compañías eléctricas podemos obviar el coste de luz, uno de los principales problemas que afecta al país, y que no es específico de España, pues se da en otros países. Hay que tratar de afrontar las discrepancias por la vía del diálogo y se ha de dejar a parte la vía de la amenaza y de trasladar de intranquilidad a ciudadanía», ha defendido Escudero.
Y es que el responsable regional de Desarrollo Sostenible ha insistido en que sería «irresponsable» que el Gobierno no adoptara medidas para evitar que la población más vulnerable que ha sufrido el golpe de la pandemia, siga viendo cómo se reducen sus ingresos por pagar el recibo de la luz.
«El Gobierno de Castilla-La Mancha apoya las medidas que ha adoptado el Gobierno de España porque están dentro del marco legal español y comunitario», ha reiterado Escudero, que ha precisado que hay un régimen retributivo formado por las eléctricas que tienen propiedad en las centrales nucleares y la reducción «no debería poner en peligro el cierre de las nucleares de forma anticipada al cierre que se reguló hace años».
«Espero que -la amenaza- forme parte de la discusión y sean declaraciones pasajeras, que no se lleven a efecto», ha zanjado Escudero.
RESPALDA LA BAJADA DEL IMPUESTO DE LA ELECTRICIDAD
De otro lado, y tras pedir «lealtad» al Gobierno de España, ha mostrado el respaldo del Gobierno de Castilla-La Mancha a la bajada que el Ejecutivo de Pedro Sánchez va a acometer del impuesto especial de la electricidad, transferido a las Comunidades Autónomas. No obstante, ha dicho estar a la espera de conocer de qué manera se va a compensar esta perdida a las autonomías.
Escudero ha reaccionado de este modo, también a preguntas de los medios, después de que el Gobierno central haya decidido reducir este impuesto, de un 5,1% a un 0,5%, que es «lo mínimo que exige la legislación comunitaria», dentro del paquete de medidas integrales que ha adoptado para recortar el recibo de la luz.
Luego de mostrarse convencido de que el Gobierno de Sánchez está trabajando para compensar esa minoración de ingresos a las Comunidades Autónomas, ha defendido que toca ser «leales», no con el Gobierno de España sino con quien «enciende cada día la luz en su domicilio o empresa».
Y es que Escudero considera que el esfuerzo ha de ser compartido, pues es necesario tomar medidas urgentes para abaratar este coste que en general afecta a la ciudadanía.
PAGE SE LAMENTA DEL COSTE EN HOSPITALES
Sobre la polémica por el precio de la luz también se ha pronunciado el presidente regional, Emiliano García-Page, que desde Talavera de la Reina ha asegurado que este es «un problema de alcance público, que tiene que tener una reflexión». «Ojalá entre todos sumemos esfuerzos porque hacer guerra política de la luz no sé si conduce a algo», ha opinado.
Ha sido en este punto donde ha desvelado que la factura de agosto de algunos hospitales de Castilla-La Mancha «se ha multiplicado por dos y en otros por tres» por lo que ha advertido de que «ya no es un problema solo de los domicilios ni de la gente».
Así, ha puesto de ejemplo un hospital de la región en concreto donde este pasado mes de agosto la factura de la luz ha ascendido a 450.000 euros frente a los 150.000 euros del mismo mes del año pasado.
