La Asociación de Jóvenes Agricultores (Asaja) comenzará este jueves una serie de protestas por toda la región para denunciar la situación del campo en Castilla-La Mancha, porque a juicio del secretario regional, José María Fresneda, «el campo está peor ahora que hace un año».
Durante una rueda de prensa, Fresneda ha asegurado que la primera manifestación tendrá lugar este jueves en Albacete, donde habrá presencia «de tractores, de coches y de mucha gente que apoya al sector del campo, obviamente preservando todas las medidas de seguridad y respetando las normas sanitarias por la pandemia».
De esta forma, el también secretario provincial de Asaja en Cuenca ha asegurado «que cada anuncio que hacen los dirigentes políticos es una convocatoria a que vaya más gente a las manifestaciones», porque según Fresneda «no hay nada que agradecer a los dirigentes, porque la presión de esta organización ha hecho que salgan pequeñas cosas adelante».
Con la misma tabla reivindicativa que antes de la pandemia, Asaja ha asegurado que esas medidas «hacen mucha falta» y ha sentenciado que el campo «ya no va a ser un granero de votos para nadie».
Entre las quejas que ha manifestado este miércoles Fresneda está la de los precios de venta, «que son insuficientes para dar rentabilidad a las explotaciones», al tiempo que se ha quejado por la ayuda para el olivar, «la cual no va a ser de 18 millones de euros como se ha anunciado, sino de 14,5 millones».
Del mismo modo, Asaja ha mostrado sus quejas tanto por el proyecto de la Ley del Vino, que la ha calificado de «insuficiente», y ha afeado a la Junta «que no se haya puesto en marcha ninguna medida del pacto del agua que se firmó hace 6 meses en la región».
«Al conjunto de la cadena alimentaria, ya sea una industria o una distribución, sí que les cuadran las cuentas, al contrario que a los agricultores y ganaderos, y sólo estamos pidiendo que se tenga en cuenta la ley de la cadena y haya un precio por lo que producimos, y que se tengan en cuenta como mínimo los costes de producción», ha pedido Fresneda, a lo que entiende que desde el sector del campo «no estamos pidiendo tanto».
Por tanto, a su juicio, «lo que el campo de Castilla-la Mancha necesita son menos anuncios y que los que se hagan que se vean que valen para algo». «Nadie se atreve a trazar la línea roja y poner en un lado a los jóvenes y al otro a los que de verdad esquilman el acuífero y como nadie se atreve a esto, lo vamos a llevar a las movilizaciones».
DEFENSA DE LA AGRICULTURA Y LA GANADERÍA REGIONAL DESDE EL PP
De otro lado, el jefe de la oposición regional, Paco Núñez, ha señalado que el PP cree «firmemente en la agricultura y ganadería», ya que «cuando uno está en política» tiene que apostar por lo que cree y no se puede basar en «titulares, anuncios y promesas que no sirven para nada».
«Yo estoy en política para tratar de impulsar políticas que son necesarias para mi región», ha añadido.
Por ello, ha apostado por encaminar las políticas del Gobierno en proteger la agricultura y la ganadería, ya que detrás hay empleos, oportunidades y desarrollo socioeconómico de una Comunidad Autónoma.
«Tengo la firme intención de convertirlo en hechos. Hoy desde la oposición y mañana desde el Gobierno», ha incidido Núñez.
Además, Núñez ha avanzado que el PP de Castilla-La Mancha va a apoyar todas las manifestaciones convocadas por Asaja y que los dirigentes ‘populares’ acompañarán a los agricultores y ganaderos en sus reivindicaciones «al final de la manifestación, empujando y agradeciendo su esfuerzo por sostener esta Comunidad Autónoma».
El presidente regional del PP ha recordado que ha pasado un año desde que el campo se manifestaba en las calles y la situación no ha mejorado, «más bien lo contrario». Mientras tanto, agricultores y ganaderos se han esforzado «intensamente» para estar en primera línea, también, para luchar contra la pandemia.
Así, ha dicho que es de «obligación» reconocer y agradecer este esfuerzo que agricultores y ganaderos han hecho durante este año de pandemia, ya que en los peores momentos, donde el confinamiento y el miedo reinaban en las casas de los ciudadanos, ellos «cada mañana iban a trabajar para garantizar el suministro de productos de primera necesidad».
Entre los principales problemas, Núñez ha destacado que hoy los costes de producción son «muy altos» en comparación con el precio de venta, por lo que agricultores y ganaderos «no tienen garantizada la viabilidad económica de sus explotaciones».
Además, sufren incertidumbre ante el posible recorte de un 10% de media en la próxima PAC o los problemas provocados por el temporal ‘Filomena’ que quemó centenares de explotaciones de olivar.
Problemas también con el vino, ya que la incertidumbre que generan los aranceles o las políticas de Estado que trascienden a la Comunidad Autónoma, preocupan por la capacidad de vender o no productos al exterior.
También, la cuestión del agua, ya que la región firmó el pasado mes de septiembre el Pacto Regional y hoy «no se ha implementado ni una de las decisiones».
