El diseño de los presupuestos de 2022 sigue adelante sin plantear subida de impuestos y sin disminuir el gasto contra la crisis sanitaria
El consejero de Hacienda y Administraciones Públicas del Gobierno de Castilla-La Mancha, Juan Alfonso Ruiz Molina, ha fijado la posición del Gobierno autonómico ante el Consejo de Política Fiscal y Financiera celebrado este miércoles de forma telemática, indicando que tras la reunión su valoración es «agridulce», ya que si bien celebra que la Comunidad Autónoma vaya a recibir cerca de 500 de los casi 14.000 millones de euros de fondos COVID, hay que lamentar que estas aportaciones no se vayan a repetir en 2022.
Sobre este reparto, ha recordado que Castilla-La Mancha defendía que la distribución de los fondos se realizara en función de criterios de población ajustada teniendo en cuenta parámetros como la dispersión, la superficie o el envejecimiento de los ciudadanos, algo que se ha tenido en cuenta frente a las comunidades autónomas que llegaron a reivindicar un reparto en función al PIB de cada una, incluso de la población.
En rueda de prensa, ha celebrado igualmente que el Estado avanzara la intención de devolver la liquidación del IVA de 2017, lo que redundará en 130 millones de euros extra para la Comunidad Autónoma; o que se vayan a asumir por parte del Estado las liquidaciones negativas de las regiones en 2020, lo que permitirá ahorrar 350 millones de euros; mientras que, por contra, la lamentado que la nueva tasa de referencia del déficit para 2022 se reduzca del 1,1% al 0,6%, extremo que provocará un ajuste adicional de 250 millones en el conjunto del gasto de la región.
También se habló de las entregas a cuenta de cara a la elaboración de los presupuestos de futuros ejercicios, que en el caso de la región ascenderán a 5.333 millones de euros.
Con todo, la valoración de Ruiz Molina global es «agridulce», tal y como mostró de manifiesto en la reunión, y su principal crítica pasa por no repetir el fondo COVID en 2022. «Pedí que se mantuviera porque nosotros vamos a seguir manteniendo el gasto relacionado con el COVID, por ejemplo en educación. Pero seguiremos con el gasto previsto», ha defendido.
Otro de los aspectos positivos de los hablado en la reunión es para Ruiz Molina el hecho de que se haya arrancado el compromiso de reeditar el Consejo de Política Fiscal y Financiera a final de año con sólo el modelo de financiación autonómica encima de la mesa.
EL PRESUPUESTO SIGUE SU CURSO SIN SUBIDA DE IMPUESTOS
Con los datos recabados en esta reunión, el Gobierno autonómico sigue trabajando en la elaboración de los presupuestos para 2022, y aunque no perdure el fondo COVID o haya que ajustar más a cuenta de la reducción de la tasa de referencia del déficit, no se plantea «exigir ningún sacrificio a los ciudadanos».
Además, ha comprometido que el gasto destinado a paliar la crisis sanitaria seguirá en los mismos niveles «con independencia» de estos dos extremos. «Seguiremos trabajando para atenuar los efectos negativos de la pandemia», ha apuntado.
Y todo ello «con el respeto más absoluto a la ortodoxia financiera y presupuestaria», según ha señalado Ruiz Molino, quien ha defendido cómo el Gobierno «siempre ha sido riguroso» en la elaboración de las cuentas.
