El Gobierno de Castilla-La Mancha ha puesto en marcha este verano una experiencia piloto para que el alumnado que ha realizado el curso de formación de auxiliar de sala y actividades turísticas dentro del proyecto ‘Uno a uno’, y que ha llevado a cabo Castilla-La Mancha Inclusiva-Cocemfe, pueda hacer prácticas en el Museo de Ciudad Real. Esta experiencia, ha explicado la viceconsejera de Cultura y Deportes, Ana Muñoz, se ampliará el próximo año a otros museos, parques y yacimientos arqueológicos dependientes de la Junta de Comunidades «con el fin de mejorar la empleabilidad de estos chicos y chicas».
Muñoz se ha pronunciado así durante un encuentro con el presidente de Castilla-La Mancha Inclusiva-Cocemfe, Enrique Alarcón, que ha estado acompañado por el presidente de Cocemfe Albacete y vicepresidente de Castilla-La Mancha Inclusiva, Marcelino Escobar; y el presidente de Aidiscam y secretario de Castilla-La Mancha Inclusiva, Francisco Cebrián. En el mismo también ha participado el delegado de la Consejería de Educación, Cultura y Deportes en Albacete, Diego Pérez, según ha informado la Junta en nota de prensa.
La viceconsejera ha detallado que este año se ha firmado un primer convenio de cooperación entre la Consejería de Educación, Cultura y Deportes y Castilla-La Mancha Inclusiva-Cocemfe para que el alumnado de esta entidad pueda realizar esas prácticas, que comenzaron el pasado 26 de julio y se desarrollarán hasta el próximo 30 de octubre, en el Museo de Ciudad Real y en el Convento de la Merced de esta ciudad.
El período de formación práctica tendrá una duración de 120 horas, lo que supone un porcentaje del 40 por ciento del programa formativo. «Nuestra intención es renovar y ampliar este convenio el próximo año para que un mayor número de alumnos y alumnas puedan realizar estas prácticas», ha añadido Muñoz.
Para la viceconsejera de Cultura y Deportes este «es uno de los proyectos más bonitos y más ilusionantes» que se han llevado a cabo desde la Consejería en materia de integración. «Para nosotros la cultura es un eje integrador, potenciador de las habilidades y sobre todo también es un nicho de empleo. Por eso debemos potenciar el acceso a la cultura no solo para disfrutarla sino también trabajar en ella», ha concluido.