La Junta de Gobierno de la Confederación Hidrográfica del Guadiana ha aprobado este lunes las dotaciones de riego para la próxima campaña, correspondiendo a la Masa Mancha Occidental II 1.350 metros cúbicos/hectárea para cultivos leñosos y 1.800 para herbáceos, aplicando el recorte del 10% propuesto por la CHG.
Desde la Comunidad de Usuarios de Aguas Subterráneas (CUAS) de la Masa Mancha Occidental II han defendido en esta Junta de Gobierno, celebrada virtualmente, el mantenimiento de las dotaciones previas al recorte de la campaña 2020, es decir, 1.500 metros cúbicos/hectárea para leñosos y 2.000 para herbáceos.
CUAS ha indicado que este recorte “abocará a miles de familias de La Mancha al abandono de la actividad agraria, un sector siempre castigado por la Administración pese a que es el que siempre da la cara por la sociedad y por la economía”. Añade que “estos recortes supondrán el abandono de explotaciones, el agravamiento de la despoblación y la perdida de muchos puestos de empleo en una situación económica actual ya muy extrema”.
A los representantes de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha les solicitan que respalden a los agricultores y rechacen los recortes aprobados por la Confederación Hidrográfica del Guadiana, que son “un ataque al sector primario de la región totalmente desproporcionado e injustificado”.
Han indicado que, como ya expusieron en la Junta de Explotación de Mancha Occidental II, no aceptan ningún nuevo recorte en las dotaciones de los agricultores de esta Comunidad de Usuarios de Aguas Subterráneas rechazando totalmente estas limitaciones y exigiendo a la Administración que en lugar de reducir las dotaciones desarrollen las alternativas de ahorro propuestas desde esta CUAS, como la regularización de las denominadas explotaciones prioritarias sujetas al Régimen de
Extracciones; la puesta en marcha urgente de la Tubería Manchega; aportaciones externas desde otras cuencas o desde la propia del Guadiana; adquisición de derechos a particulares o agilización de resolución de expedientes, con años de retraso, en algunos casos.
Consideran que mientras los agricultores son sometidos a recortes periódicos en sus dotaciones, la Administración no cumple con sus obligaciones, por ello, plantean que se desarrolle esta serie de propuestas estructurales, algunas de ellas contempladas por ley, porque “después de más de 30 años y con unas políticas erráticas de la Confederación centradas en esquilmar derechos a los regantes es el momento de cambiar”.