El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, se ha referido a la decisión de Juan Carlos I de trasladarse fuera de España, considerando que una «conducta personal concreta» no puede «socavar» la institución de la Corona.
En declaraciones, García-Page ha pedido «distinguir entre las instituciones y las conductas personales», recordando que el Estado de Derecho que ahora debe de aclarar la conducta de Juan Carlos I «se debe, entre otros, y de manera muy destacada, al propio Rey Juan Carlos».
En su opinión, si una conducta pudiera socavar una institución entera, «no habría partidos, ni Parlamento, ni Gobierno». «En cualquier caso, el Rey Felipe está desarrollando su trabajo con una templanza admirable», ha afirmado.