Una posible flexibilización de las medidas de restricción en velatorios y funerales para que las personas puedan despedir a sus seres queridos también es una medida que «está sobre la mesa» para la fase de desescalada. Sin embargo, el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES), Fernando Simón, ha especificado que se tiene que evaluar «con mucho cuidado» el mecanismo para implementarla.
«Los velatorios y funerales, por experiencia propia aquí en España, en otros países, y con muchas otras epidemias que hemos conocido en los últimos años, nos indican que son situaciones de alto riesgo para la transmisión», ha recalcado en la rueda de prensa telemática del Comité de Expertos.
Simón ha insistido en que la restricción «tan importante» en la movilidad ha permitido controlar el virus, lo que «se va viendo cada día» y «se va a ver de forma más notoria en los próximos días». «Ese era un objetivo fundamental para todos. Además, para reducir el número de fallecidos y reducir estas situaciones en las que hay mucha gente que obviamente ha tenido la desagracia de perder seres queridos», ha añadido.
En este sentido, ha asegurado que estas restricciones en velatorios y funerales que se puso en su momento ha dado unos frutos «muy buenos» pero «obviamente», según ha indicado, también es una de las medidas que en su momento «se tendrá que plantear como una opción para volver a la rutina».
La Conferencia Episcopal planteó hace unas semanas la posibilidad de que con las debidas medidas de higiene, protección y distanciamientos social, se pudiera facilitar la despedida de los seres queridos fallecidos. «¿No sería posible producir en nuestro entorno más equipos de protección que, además de proteger al personal sanitario, permitieran la presencia de los familiares más cercanos y la debida asistencia espiritual?», señalaron en un comunicado durante la Semana Santa.
