El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha dicho, al respecto de un posible regreso a España del Rey emérito Juan Carlos I tras regularizar su situación fiscal, que la única limitación que se le debe imponer a su regreso es estrictamente sanitaria, ironizando sobre que tendrá que someterse a una prueba diagnóstica para saber si se ha contagiado de coronavirus.
Así lo ha asegurado a preguntas de los medios tras una rueda de prensa desde Talavera de la Reina, donde ha apuntado que «nadie ha echado» a Juan Carlos I de España ni nadie puede decirle que no pueda volver».
En su argumentación, ha indicado que aquellos frentes que van a criticar al monarca «lo que quieren es tumbar la Constitución» bajo su bandera de «acabar con el régimen del 78».
«No sólo puede volver, es que tiene que vivir donde tiene que vivir el anterior Jefe del Estado. Lo demás es una mezquindad. Los que plantean eso están saltándose el derecho básico a la presunción de inocencia y los derechos básicos fundamentales», ha reiterado.
En su opinión, Juan Carlos I «tiene que responder ante quien se lo reclame, como todos los demás», por lo que ha pedido que si los tribunales no le ven culpabilidad, será algo que los críticos tendrán que aceptar. «Me temo que hay gente a la que le da lo mismo y ya tiene hecha la condena del telediario».
Por último, ha abundado en que si alguien «tiene dudas» del buen funcionamiento del sistema constitucional o judicial, «que lo diga donde lo tiene que decir, y no en un periódico o en una rueda de prensa».