El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha avanzado que para la próxima edición del Debate sobre el Estado de la Región que arranca este miércoles en el Parlamento autonómico llevará un discurso con «decenas de anuncios y compromisos, algunos reformulados y para construir en positivo» con voluntad de «consenso» y «sobre la base de mejorar los aspectos ya pactados con empresarios, sindicatos y FEMP».
En una comparecencia de prensa desde el Palacio de Fuensalida, García-Page ha señalado que también tiene la intención de hacer «algún planteamiento en el que el Gobierno va a exigir más controles» del gasto público.
«Estoy dispuesto a que se nos haga ese control, que se me haga a mí una auditoría económica más allá del Tribunal de Cuentas», ha dicho, controles económicos que tendrán que extenderse a todas las empresas públicas «y a la UCLM».
Esos controles son necesarios «sobre todo ahora» que se van a recibir muchos fondos europeos, y la sociedad «necesita la tranquilidad» de que van a ser bien gestionados.
«Llevo a gala y es mi obsesión intentar irme de la política sin una mota de polvo. Con muchos errores, pero habiendo metido la pata y no la mano», ha zanjado.